Investigadores mexicanos desarrollan un sistema de producción de hidrógeno a través de energía solar, gasificación de biomasa y desechos plásticos. El proceso, que funciona en laboratorio, promete ser una alternativa a gran escala para producir energía y procesar contaminantes, dijo a Tierramérica Hernando Romero, científico del área de Ingeniería en Recursos Energéticos de la Universidad Autónoma Metropolitana de México (UAM).
Con el apoyo de expertos de Alemania, España, Francia y Suiza, los investigadores de la UAM generan el hidrógeno a través de métodos de termoquímica solar que gasifican los desechos.
El hidrógeno, que ya se usa en motores y en procesos industriales, es considerado una fuente limpia, pues proporciona mayor liberación de energía por peso que cualquier otro combustible y no produce emisiones tóxicas. Sin embargo, su obtención aún es relativamente cara y complicada.
