La sociedad ecológica venezolana Vida Marina apeló a turistas y pescadores para ayudar al seguimiento de orcas provenientes del océano Atlántico Norte avistadas en el Caribe Sur. El objetivo es establecer posibilidades de estudio, dijo a Tierramérica su director ejecutivo, Jaime Bolaños.
«Cetáceos de esta especie (Orcinus orca) pueden ser nómadas o sedentarios, lo que abre interrogantes acerca de por qué llegaron aquí, si sólo siguiendo las corrientes frías del Atlántico, a la caza de alimento, o si ese desplazamiento puede asociarse al cambio climático», indicó Bolaños.
Vida Marina teje enlaces con entidades de las vecinas islas francesas y holandesas, así como de República Dominicana y Puerto Rico, para el seguimiento de la blanquinegra ballena, cuya figura de nueve metros y seis toneladas comenzó a entretener en mayo a los navegantes del Caribe venezolano.