En Guatemala se destruyen anualmente 500 hectáreas de manglares, lo que podría devastar 40 por ciento del ecosistema del país, denunció Carlos Albacete, de la organización Trópico Verde. El ambientalista explicó a Tierramérica que los manglares guatemaltecos sufrieron graves alteraciones desde mediados de los años 50.
«Primero fue la agricultura, después la ganadería, y más tarde las industrias camaronera, salinera y turística las causantes de los daños», señaló.
Debido al deterioro, en 2001 el Consejo Nacional de Áreas Protegidas colocó a todas las especies de mangle en la lista de flora en peligro de extinción.
Según datos oficiales, en Guatemala hay 16 mil hectáreas de manglares, pero Trópico Verde calcula que son 12 mil hectáreas. «La diferencia radica en que los mapas son muy grandes, impidiendo un cálculo con precisión, indicó Albacete.