El Colegio Médico de la ciudad chilena de Ñuble, 500 kilómetros al sur de Santiago, alertó sobre los potenciales efectos dañinos de la inminente apertura del Complejo Forestal Industrial Nueva Aldea de la empresa Celulosa Arauco y Constitución (Celco). A juicio de esta entidad, la descarga de desechos de la planta de celulosa significará un riesgo importante e irreversible para la salud de más de 45 mil personas que usan las aguas del río Itata para consumo humano, pesca artesanal y riego agrícola.
El presidente de la orden regional, Carlos Rojas, dijo a Tierramérica que las sustancias que se producen en el proceso de blanqueado, como resinas y productos organoclorados, pueden provocar cáncer y malformaciones congénitas.
El colegio aseguró que verter los desechos al mar, tal como se anunció, no solucionará el problema