Las últimas inundaciones de Sri Lanka, atribuidas por científicos al cambio climático, no recibieron la atención debida, pues, al mismo tiempo, aviones de los insurgentes Tigres para la Liberación de la Patria Tamil incursionaban sobre la capital del país.
Ni el gobierno ni la sociedad civil prestaron atención al informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) de las Naciones Unidas presentado la semana pasada en Bangkok, sobre el peligro del recalentamiento planetario.
Pocos días antes de la reunión del IPCC en Bangkok, el vicepresidente de esa organización con sede en Ginebra, Mohan Munasinghe, dijo a IPS: "Nadie se toma en serio el cambio climático porque no es algo que se vea hoy ni mañana."
Pero la inundación iniciada el jueves de la semana pasada parece un presagio de lo que vendrá.
La mayor parte de la zona comercial de esta ciudad costera quedó inundada y el tránsito, paralizado. Varias personas murieron, incluida una mujer que desapareció por una alcantarilla sin protección. Las lluvias de "alta intensidad" prosiguieron el viernes y el sábado.
"Alta intensidad significa que las precipitaciones que deben caer en un periodo determinado o a lo largo de varios días caen en uno sólo, y eso fue lo que sucedió el jueves", explicó Kusum Athukorala, experto en recursos hídricos.
"Éste es el impacto del cambio climático. La mala administración de los políticos son responsables, pues permitieron construcciones y ocupaciones de pantanos, tierras anegables y ríos", señaló Athukorala, quien desde hace años pelea con las autoridades locales por esas cuestiones.
Lo que sucedió en Colombo tiene una semejanza inquietante con las inundaciones que asolaron la ciudad portuaria india de Mumbai en julio de 2005 y que causaron cientos de muertos.
Entonces, los expertos concluyeron que la capacidad de esa metrópolis había sido seriamente afectada por la desenfrenada construcción no autorizada, que bloqueó cursos de agua y eliminó la vegetación de protección.
Lo sucedido en Mumbai fue atribuido por varios científicos de renombre, incluido el presidente del IPCC, Rajendra Pachauri, al cambio climático.
En ese momento, expertos previeron que otras ciudades portuarias de Asia podían ser vulnerables, a menos que se adoptaran medidas drásticas en forma urgente.
La agrónoma Shanthi de Silva, de la Universidad de Sri Lanka, cree que la elevación del nivel del mar y de la temperatura pueden hacer que Colombo sucumba bajo las intensas lluvias en los próximos años.
"No contamos con la infraestructura para hacer frente a las inundaciones", sostuvo, y añadió que sus conclusiones se basan sobre investigaciones realizadas el año pasado por una universidad británica que creó nuevos modelos para prever las consecuencias del cambio climático.
Según sus estudios, las precipitaciones en abril y mayo en zonas húmedas, incluida Colombo, se duplicarán respecto de años anteriores, en tanto que las zonas secas se tornarán más áridas.
"El impacto sobre la biodiversidad será enorme", sostuvo la especialista.
Las consecuencias del recalentamiento global en la economía de países pobres como Sri Lanka es uno de los asuntos más ignorados en el debate acerca del cambio climático.
Organizaciones ambientalistas de Colombo creen que las naciones industrializadas se beneficiarán del recalentamiento planetario a expensas de las más pobres.
La directora ejecutiva del Centro de Estudios Ambientales y Naturales, Piyal Parakrama, señaló que el recalentamiento reducirá la producción de alimentos en los países tropicales como Sri Lanka, al tiempo que acortará los inviernos en Estados Unidos y Europa.
"Los inviernos más cortos implicarían más días dedicados a la producción de alimentos en el Norte. Tendremos que afrontar una crisis alimentaria y nos veremos obligados a importar", apuntó.
El impacto del recalentamiento planetario sobre la biodiversidad ya es visible.
"Ya hay indicios de que este año el cuervo construye tarde su nido, obligando al koel a retrasar su llegada durante el año nuevo cingalés e hindú, celebrado el mes pasado", señaló, Parakrama, quien atribuyó el hecho al cambio climático.
Parakrama también señaló que varias especies de plantas florecen fuera de temporada, aunque el asunto aún debe ser investigado para establecer un vínculo con el cambio climático.
Otros signos de ese fenómeno como la decoloración de los corales cercanos a la meridional ciudad costera de Hikkaduwa, un conocido destino turístico, se aceptan mejor gracias a las mejores investigaciones existentes al respecto.
Para la zoóloga de la Universidad de Colombo Deepthi Wickremesinghe, el cambio climático seguramente afecte la vida marina de la zona y quizá también a los anfibios como sapos y ranas, predadores naturales de mosquitos y otros vectores.
"Por desgracia no contamos con investigaciones ni pruebas suficientes acerca del posible impacto del cambio climático sobre la población anfibia, por lo que sólo nos basamos sobre suposiciones", explicó, añadiendo que se trata de un problema poco estudiado.
Se teme por el futuro del turismo ecológico en cascadas, selvas y ambientes biodiversos que se extienden desde las tierras altas donde se cultiva té hasta las paradisíacas playas. Esa actividad económica ya sufrió las consecuencias del violento conflicto armado que ha devastado a esta nación insular.
"Asesoro al presidente srilankés desde hace años, pero no ha prestado atención a todas mis recomendaciones", indicó Munasinghe, experto de renombre internacional en energía y cambio climático, respecto de la prioridad acordada por el gobierno a la guerra civil.
Munasinghe sostuvo que la mayor parte del norte y el este de la isla, donde se libran los principales enfrentamientos entre los rebeldes Tigres tamiles y los efectivos del gobierno, puede quedar bajo agua en las próximas dos o tres décadas.
Además, las cambiantes temperaturas pueden provocar la emigración de mosquitos de las tierras bajas a las zonas más altas, causando brotes de malaria, dengue y otras enfermedades transmitidas por esos insectos, según varios expertos.
Lo más preocupante es la consecuencia que los cambiantes patrones climáticos puedan ocasionar a la riqueza ambiental de este país, uno de los más biodiversos del mundo, indicó Parakrama
"Las selvas necesitan un clima estable para mantener su biodiversidad, los cambios son un problema", añadió. (FIN/IPS/traen-vf-mj/fs/rdr/ap dv en ip bd if gb cv/07)