ECONOMÍA-CHINA: Se busca modelo de desarrollo sustentable

El gobierno de China busca una nueva fórmula para seguir expandiendo esta economía de aceleradísimo crecimiento, pero trata de adoptar un modelo de desarrollo más sustentable para consumir y contaminar menos el país y el mundo.

Hoy, la economía nacional tiene un alto costo para el ambiente y se acentúa la brecha de ingresos dentro de la población.

Y allí está el dilema.

China sabe de sobra que el actual modelo de desarrollo, impulsado por las grandes inversiones y las exportaciones, es insostenible, pero teme que al recalibrar la economía pueda elevarse el desempleo y generarse inestabilidad política.

Las inversiones aumentan a paso lento y sus efectos sociales adversos podrían poner en peligro la legitimidad del gobernante Partido Comunista, que llegó al poder hace 58 años con la promesa de mayor prosperidad.

El primer ministro chino Wen Jiabao declaró el lunes, al abrir la sesión anual de la Asamblea Nacional del Pueblo (el parlamento chino) que no abandonaría el modelo de crecimiento propiciado por las exportaciones y que contribuyó a ubicar el país como cuarta economía mundial.

"Impulsar el desarrollo económico y aumentar el empleo mediante la expansión del comercio exterior es una política que mantendremos todavía durante un largo tiempo", afirmó Wen.

Esas precedieron la llegada a Beijing este miércoles del secretario del Tesoro (ministro de hacienda) de Estados Unidos, Henry Paulson, para informar que el gobierno de George W. Bush está insatisfecho con el enorme excedente comercial a favor de China y su devaluada moneda. El crecimiento de la economía china en los últimos años dependió en gran medida del aumento de sus exportaciones, siendo vulnerable a una disminución de la demanda y elevando el riesgo de reacciones proteccionistas violentas en Estados Unidos y otros países.

El auge de las exportaciones llevó sus reservas en divisas a un billón de dólares y tensionó el vínculo con sus socios comerciales.

Las mercancías chinas son baratas porque este país mantiene devaluado el yuan, su moneda, según fabricantes y legisladores estadounidenses y europeos.

Paulson alertó la semana pasada que hay una "tendencia preocupante" en el Congreso legislativo de Estados Unidos a aceptar la idea erigir barreras comerciales para contener la inundación de productos chinos baratos.

Beijing es consciente de que el crecimiento actual, propiciado por las exportaciones y las inversiones, le trae varios problemas en el ámbito internacional, pero también nacional.

En lo local, el modelo es cuestionado porque funciona a expensas del consumo privado, y en el exterior, porque se lo acusa de crear tensiones comerciales y exportar contaminación.

"Tenemos que ajustar el equilibrio entre inversiones y consumo", indicó Wen en su informe dado en el Gran Salón del Pueblo de Beijing, sede de la Asamblea Nacional del Pueblo.

Como el consumo es la principal forma de mejorar los estándares de vida, los expertos señalan que la dependencia de China de las exportaciones y las inversiones frena la prosperidad.

Esa situación queda en evidencia en el campo, donde viven unas 800 millones de personas, o más de 60 por ciento de los más de mil millones de habitantes que tiene el país. El ingreso promedio de los campesinos en 2006 fue de unos 463 dólares, menos de un tercio del de los residentes urbanos, según estadísticas oficiales.

Anteriormente, el gobierno había prometido elevar el gasto para que no quedaran rezagados los ingresos en el campo. También dio el puntapié inicial de una medida de "reconstrucción rural" que pretende construir mayor infraestructura en las aldeas y canalizar más fondos para la salud y la educación.

Wen Jiabao confirmó que Beijing sigue impulsando el consumo interno para hacer crecer la economía.

"Adoptaremos una serie de medidas para elevar el ingreso de los campesinos y de la población urbana, en especial los de aquellos con pocos recursos. Debemos adherir al principio de impulsar la demanda interna concentrándonos en el aumento del consumo", declaró el primer ministro.

A largo plazo, el gobierno se propone ofrecer incentivos para que las personas gasten más y ahorren menos, estimulando programas sociales como asistencia médica y educación entre otros.

Pero los expertos advierten que eso llevará mucho tiempo y se requerirá de un enorme aumento del gasto del Estado, antes de que pueda haber un progreso significativo en el consumo en el ámbito rural.

"En este momento, la medida para la reconstrucción rural se orienta a la reducción de los problemas que China causa en el extranjero con sus excesivas importaciones y exportaciones", indicó Wen Tiejun, especialista de trayectoria en cuestiones rurales de la Universidad Renmin, Beijing.

El veloz crecimiento económico de China, de hecho, tiene consecuencias internacionales.

Es una de las razones por las que el precio del petróleo y otros productos básicos se elevó tanto en los últimos dos años. Por otra parte, el elevado superávit comercial chino, que alcanzó 180.000 millones de dólares en 2006, agrava las relaciones con sus socios comerciales.

Otro efecto de esta situación es la contaminación que origina y "exporta" el país. China, el mayor productor y consumidor de carbón y mayor emisor de dióxido de azufre. Las emisiones de ese gas se consideran responsables de lluvia ácida en Corea del Sur y Japón.

Las tormentas de arena en la frontera debido a la sobreexplotación de tierras y la desertificación son otros problemas que deben afrontar los países vecinos. Se teme ahora que el viento traslade hacia el oeste las crecientes emisiones tóxicas, por el océano Pacífico hasta América del Norte.

Wen Jiabao estableció en ocho por ciento el objetivo de crecimiento económico para este año, el mismo de 2006, pero reconoció la dificultad de ponerle un tope a su desenfrenado aumento. El año pasado el producto interno bruto llegó a 10,7 por ciento.

Beijing trata de frenar las inversiones y moderar el crecimiento, pero a los políticos les gustaría que la economía siga siendo fuerte para garantizar la estabilidad política antes de los Juegos Olímpicos de Beijing, que tendrán lugar en agosto de 2008. (FIN/IPS/traen-vf-mj/ab/ap dv if ip pr gb/07)

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