Serbia acudirá a las urnas este domingo con sentimientos profundamente divididos respecto de la oferta de los candidatos sobre el rumbo del país.
"Aquí no hay una escena política clásica o una división entre la izquierda y la derecha", dijo a IPS el profesor de derecho Vojin Dimitrijevic. "Esto tiene que ver con romper o no con el pasado reciente, ingresar a un futuro mejor o volver al aislamiento".
Más de seis millones de votantes optarán entre unos 20 organizaciones políticas. La batalla principal será entre el ultranacionalista Partido Radical Serbio y el reformista Partido Demócrata.
El nacionalista moderado Partido Democrático de Serbia, del primer ministro Vojislav Kostunica, no repetirá sus resultados anteriores.
El Partido Radical Serbio es liderado por Vojislav Seselj, quien afronta un juicio por crímenes de guerra ante el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (ICTY).
Esta partido fue una de las piezas de la maquinaria bélica del fallecido presidente serbio y yugoslavo Slobodan Milosevic (1989-2000), y desde los días del más duro aislamiento de Serbia hasta ahora.
Milosevic cayó en un levantamiento popular en 2000, y falleció en marzo de 2006 en la cárcel del ICTY.
El Partido Radical Serbio cuenta, según las encuestas, con la intención de voto de 30 por ciento de los electores consultados.
Este sector se opone a cooperar con el ICTY y exige el control de la meridional provincia de Kosovo, administrada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) durante los últimos ocho años.
El estatus de Kosovo debe resolverse en negociaciones patrocinadas por la ONU, con cierta forma de independencia como el resultado más probable. Serbia se ha opuesto a esa opción.
El fracaso de Serbia en hallar y extraditar al comandante militar serbo bosnio Ratko Mladic por crímenes de guerra condujo a la suspensión del Acuerdo de Estabilización y Asociación con la Unión Europea en mayo. Mladic se encuentra prófugo desde hace más de 10 años.
Nadie cree que la coalición que hoy gobierna Serbia, integrada por el Partido Democrático y dos sectores pequeños, obtenga más de 17 por ciento de los votos. El gobierno de Kostunica recibió el apoyo, cuando fue necesario, de los socialistas de Milosevic en el parlamento.
"El temor de Kostunica era que los ultranacionalistas agitaran al público si Mladic era entregado y provocaran disturbios en el país", dijo a IPS el analista Zoran Lutovac. "Pero la reticencia a actuar decisivamente en cualquier dirección le está costando mucho a su partido."
El partido al que las encuestas asignan el segundo puesto, el Demócrata, es liderado por el presidente Boris Tadic, uno de los principales colaboradores del primer jefe de gobierno no comunista, Zoran Djindjic.
Djindjic lideró la oposición a Milosevic y, una vez en el poder, lo entregó al ICTY. Fue asesinado hace cuatro años por partidarios de su antecesor.
El Partido Demócrata cuenta con entre 27 y 30 por ciento de apoyo, según sondeos recientes. Promete resolver rápidamente el asunto Mladic, porque "Serbia perdió demasiado tiempo", dijo Tadic esta semana.
"Estas son las elecciones más inciertas hasta ahora, y también son las más importantes desde la caída de Milosevic", dijo a IPS Marko Blagojevic, de la no gubernamental organización de control electoral CeSID.
"Todas nuestras encuestas muestran que ningún partido obtendrá una mayoría, y que las coaliciones serán necesarias", agregó.
"La parte más interesante serán las coaliciones post-electorales, dado que prácticamente decidirán el futuro", dijo el analista Zoran Stojiljkovic, de la Facultad de Ciencia Política.
Como muchos otros, Stojiljkovic cree que una coalición entre el gobernante Partido Democrático y el ultranacionalista Partido Radical Serbio sería un "suicidio político" para el primer ministro Kostunica.
"Eso significaría el aislamiento para Serbia, no entregar a Mladic y no renovar las conversaciones con la Unión Europea", explicó.
La única coalición razonable, según los analistas, incluiría al Partido Democrático del primer ministro Kostunica y el Partido Demócrata del presidente Tadic.
Los medios internacionales a menudo describen a los serbios como predominantemente nacionalistas, pero los analistas dicen que la mayoría de ellos están cansados de los viejos juegos.
"Las mejoras económicas en el país, donde los ingresos son 10 veces más altos que en octubre de 2000, abrieron muchos ojos", dijo a IPS la economista Misa Brkic.
"El sueño de la mayoría de los serbios cambió del nacionalismo al pragmatismo que dice: 'Finalmente estoy viviendo mejor, y quiero vivir aún mejor a partir de esto'", agregó. ***** +BALCANES: OTAN bombardea el pasado (https://www.ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=39498) +TURISMO-SERBIA: Los frutos de la paz (https://ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=39320) (FIN/IPS/traen-js-mj/vz-ss/eu ip/07)