MÉXICO: Movimiento social de Oaxaca rechaza la violencia

Líderes de la sociedad civil movilizada desde mayo en el meridional estado mexicano de Oaxaca en demanda de la remoción del gobierno local, al que acusan de inepto y represor, cuestionaron a presuntos guerrilleros que dijeron salir en su defensa y les exigieron no intervenir.

"Todo el pueblo debe estar en la lucha, pero rechazamos el activismo armado, pues da a los poderes (públicos) la justificación de una ola represiva", dijo a IPS Florentino López, portavoz de la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO).

Unas 15 personas armadas y con sus rostros cubiertos, que aseguraron pertenecer a seis diferentes grupos insurgentes, bloquearon el jueves una carretera en el norte de Oaxaca y repartieron panfletos en los que saludaron a la APPO y advirtieron que podrían entrar en acción si las autoridades reprimen la movilización social.

"Nosotros tenemos diferencias con ellos (los guerrilleros) y creemos que su presencia no nos beneficia, es mejor que no intervengan", señaló López en entrevista telefónica desde la ciudad de Oaxaca, la capital del estado del mismo nombre.

El centro de esa ciudad, de unos 300.000 habitantes, está ocupado desde mayo por cientos de vecinos y militantes de organizaciones sociales, que instalaron campamentos y barricadas en protesta por mejoras salariales primero y otros muchos reclamos después.
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Los activistas mantienen además paralizadas todas las oficinas estatales, entre ellas están cerrados los edificios de Cámara de Diputados local, el Tribunal de Justicia y la Casa de Gobierno. También ocupan cinco estaciones de radio privadas y una del Estado.

Las protestas iniciaron en mayo cuando los maestros oaxaqueño, aglutinado en la llamada Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, lanzaron su protesta en demandar de mejores sueldos, a lo cual posteriormente se sumaron otras organizaciones de la sociedad civil.

Tras varios intentos frustrados de negociación, la dirigencia de la APPO comenzó esta semana en la capital de México diálogos con el secretario (ministro) de Gobierno (Interior), Carlos Abascal. Según reportaron las partes, aún no hay acuerdos, pero continuarán con el intento.

La demanda central de la APPO es la renuncia del gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, del histórico Partido Revolucionario Institucional (PRI), quien fue elegido en 2004 para un período de seis años. Los opositores afirman que Ruiz llegó al cargo gracias a un fraude.

"Nuestra organización está fuerte, pero somos pacíficos y encauzamos nuestras demandas a través de la legalidad y las instituciones, por eso el interés en el diálogo no en las armas y la violencia", declaró el dirigente de la APPO, organización que aglutina a cerca de 1.000 delegados de diversas agrupaciones políticas y sociales de Oaxaca.

No obstante, el bloqueo de calles y el cierre forzado de edificios públicos, así como la ocupación de medios de comunicación y la presencia de gente armada con palos y piedras, son acciones ilegales, se le cuestionó.

"No nos dejaron otro camino, pero tenga la certeza de que no somos violentos y que sólo queremos el fin de la represión y el mal gobierno", respondió López, quien es además dirigente de la organización política oaxaqueña Frente Popular Revolucionario.

Además, "aquí (en Oaxaca) las víctimas de la represión somos nosotros, el pueblo ", añadió.

La referencia de López fue para hechos de violencia no aclarados aún, protagonizados por grupos armados irregulares al parecer vinculados al gobierno de Ruiz, además de acciones directas de la policía contra los manifestantes de la APPO. Ya suman seis los muertos y varios los detenidos desde que comenzó la protesta.

La no gubernamental Red Oaxaqueña de Derechos Humanos denunció que en ese estado sureño, el gobierno estaría movilizando a grupos de corte paramilitar para reprimir la movilización social.

"Hay grupos entrenados y vestidos de civil que nos disparan en las noches y otros que creemos están formados por delincuentes que hace poco estaban en la cárcel y que fueron liberados para atacarnos", denunció López.

La APPO afirma que la crisis en Oaxaca estalló "por tanto atropello de la gente del PRI", que siempre han gobernado el estado, por la pobreza, los abusos a los derechos humanos y el autoritarismo.

En Oaxaca la pobreza alcanza a más de la mitad de sus 3,2 millones de habitantes, gran parte de los cuales son indígenas.

En ese estado, la tasa de analfabetismo de los habitantes mayores de 15 años llega a 21,5 por ciento y la escolaridad promedio es de 5,6 años, casi dos menos que el promedio nacional. Además, 12,7 por ciento de su población no dispone de energía eléctrica y 34,5 por ciento no tiene en sus hogares agua potable entubada.

Grupos humanitarios denuncian que en Oaxaca se cometen violaciones sistemáticas de los derechos humanos, no se respeta la libertad de expresión, y los poderes Legislativo y Judicial están a merced del Ejecutivo estadual y, por ende, del PRI, que perdió el gobierno nacional en 2000 tras siete décadas de ejercerlo de modo constante.

Desde 2005, el diario local Noticias, de oposición, ha sufrido ataques y sus instalaciones ocupadas por presuntos huelguistas. Pero los periodistas de ese medio, que acusan al gobierno de Ruiz de querer acallar su voz, niegan tener un problema laboral y desde un edificio alterno siguen trabajando y publicando.

Según el gobierno de Oaxaca, todas las acciones de protesta son orquestadas por grupos violentos y dijo no descartar que entre ellos haya guerrilleros.

Fuentes del gobierno nacional de Vicente Fox reconocen que en Oaxaca hay presencia de algunos grupos insurgentes de corte marxista, como el Ejército Popular Revolucionario (EPR), pero entienden que no tienen vínculos con la APPO.

El EPR ha realizado algunos actos de propaganda en los últimos años, pero no acciones de envergadura y los servicios de inteligencia mexicanos le atribuyen escaso poder de acción. Entre los presuntos guerrilleros que salieron el jueves a dar su respaldo a la movilización en Oaxaca no estuvo esta agrupación.

Los panfletos que entregaron estaban firmados por grupos denominados Tendencia Democrática Revolucionaria-Ejército del Pueblo, Colectivo Revolucionario Francisco Javier Mina, Brigada de Ajusticiamiento 2 de diciembre, Movimiento Revolucionario Lucio Cabañas, Organización Insurgente 1 de mayo y Brigadas Populares de Liberación.

En México habría al menos una docena de grupos guerrilleros, además del atípico y conocido internacionalmente Ejército Zapatista de Liberación Nacional, con asiento Chiapas, señalan diversas investigaciones.

El número de miembros de esos grupos, que en los últimos años sufrieron la detención de varios de sus dirigentes, no se conoce con exactitud, aunque se sabe que en su mayoría son campesinos de zonas pobres de los estados de Guerrero y del vecino y meridional Oaxaca, limítrofe de Chiapas.

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