Productores de azúcar de algunos de los países más pobres del mundo propusieron a la Unión Europea (UE) una alternativa a su política de importación de ese producto básico que a su criterio tendría un impacto mayor y más positivo sobre el desarrollo.
El plan, arguyen, podría crear miles de empleos en los países en desarrollo y atraer cerca de 500 millones de dólares en inversiones.
La propuesta de LDC Sugar Group (Grupo del Azúcar de los Países Menos Adelantados) responde al plan de reforma de la política azucarera anunciado el pasado julio por la Comisión Europea, brazo ejecutivo de la UE, para reducir en dos tercios el precio garantizado a las importaciones de azúcar entre 2005 y 2007, y reducir las cuotas del producto.
Con base en un informe que encargó a la firma consultora LMC Internacional, el LDC Sugar Group, que reúne a embajadores de los países más pobres con interés en el azúcar y a representantes de esa industria, afirmó que su alternativa crearía 145.000 nuevos empleos permanentes y muchos más en forma indirecta.
Nuestra propuesta limitaría la reducción de precios a mediano plazo y alargaría el período previsto para la reforma de tres a 10 años, a la vez que continuaría con las cuotas, explicó el grupo en una declaración publicada el lunes.
De acuerdo con su política de desarrollo, que ha sido criticada por discriminar a productores de azúcar de otros países pobres, la UE paga actualmente por encima de los precios del mercado a varias de sus antiguas colonias de África, el Caribe y el Pacífico (ACP).
El acceso preferencial de los países de ACP al mercado europeo representa cerca de 70 por ciento del ingreso de sus sectores azucareros.
Se prevé que la pérdida de esos privilegios causará un fuerte perjuicio económico a muchos países de ACP dependientes de las exportaciones de azúcar a la UE. El actual régimen deberá terminar en 2006.
La UE fue obligada a cambiar sus políticas debido a la queja de países productores de azúcar externos a ACP, como Brasil y Australia, que protestaron ante la Organización Mundial del Comercio (OMC). Esta organización apoyó en parte esos reclamos en octubre de 2004.
La Comisión sostiene que su plan mejorará la competitividad del sector azucarero, promoverá la diversificación en regiones dependientes del azúcar y atenderá necesidades de adaptación en general.
Sin embargo, funcionarios del grupo de 27 países menos adelantados productores de azúcar arguyen que la reforma será desastrosa para sus países y pondrá en riesgo cientos de miles de empleos.
LDC Sugar Group, que incluye a países productores como Burundi y Somalia, exhorta a mantener por 10 años el acceso libre de aranceles y las cuotas.
Este período adicional dará tiempo a estos países para atraer inversiones y desarrollar industrias azucareras sostenibles, arguyó el grupo.
La propuesta de LDC Sugar Group también prevé una reducción del precio del producto de 20 por ciento, mucho más modesta que la anticipada por la Comisión Europea, de 37 por ciento.
Los países menos adelantados creemos que una reducción sustancial del precio que paga la UE por el azúcar sería un grave obstáculo al desarrollo potencial de la iniciativa Todo menos Armas, declaró el grupo, en referencia al plan adoptado por la UE en septiembre de 2000 para liberalizar las importaciones de todos los productos de los países pobres, excepto las armas.
Maurice Jannsen, del LDC Sugar Group, confía en que el informe publicado por el grupo tenga un fuerte impacto. Las conclusiones son tan contundentes que no podrán ser ignoradas, dijo a IPS.