Es una ironía de la historia que la figura de Mahatma Gandhi, artífice de la independencia de India en 1947, esté ahora en una suerte de competencia de popularidad con la del líder nacionalista hindú Veer Savarkar, acusado de colaborar en su homicidio.
Gandhi fue asesinado a balazos el 30 de junio de 1948 por uno de los tantos ultranacionalistas hindúes de la época que cuestionaban al llamado apóstol de la paz por haber aceptado la división de Asia meridional entre India, donde predomina el hinduísmo, y Pakistán, de mayoría islámica..
Sin embargo, fue Savarkar, en su lucha armada por la independencia india de Gran Bretaña, uno de los principales impulsores de la idea de las dos naciones, una hindú y otra musulmana.
Gandhi, quien predicaba la resistencia pacífica a los británicos, aceptó la división sólo cuando vio que era inevitable y que impedirla provocaría un baño de sangre.
En sus seis años de gobierno concluidos en mayo, el partido nacionalista hindú Bharatiya Janata hizo todo lo posible para rehabilitar la figura de Savarkar, detenido en 1948 por su supuesta participación en el asesinato de Gandhi pero luego liberado por falta de pruebas.
Savarkar murió en 1966, y se convirtió en un héroe para Bharatiya Janata, cuyos líderes colocarían años después su retrato en un salón del Parlamento.
El secular Partido del Congreso ganó las elecciones generales realizadas entre abril y mayo. La derrota de Bharatiya Janata provocó la inmediata renuncia del primer ministro Atal Bihari Vajpayee, al frente del gobierno desde 1998.
La líder del partido ganador, Sonia Gandhi (viuda del primer ministro Rajiv Gandhi, asesinado en 1991 y nuera de la primera ministra Indira Gandhi, también asesinada pero en 1984), se negó a asumir el cargo de primera ministra.
En su lugar, quedó como jefe del gobierno Manmohan Singh, un miembro de la minoría sij que fue ministro de Finanzas entre 1991 y 1996.
Savarkar es considerado un gran patriota por millones de hindúes, en especial en su nativo estado de Maharashtra (oeste), pero sus críticos aseguran que, además de haber conspirado para asesinar a Gandhi, en cierta ocasión logró salir de una cárcel británica de las islas Andaman, en la bahía de Bengala, tras jurar fidelidad a la metrópoli.
En una reciente visita a las islas, el ministro de Petróleo y Gas, Mani Shankar Aiyar, uno de los líderes históricos del Partido del Congreso, ordenó la remoción de una placa con frases de Savarkar colocada durante el gobierno de Bharatiya Janata, y la reemplazó con otra que contiene citas de Gandhi.
Bharatiya Janata ahora esgrime ese insulto a la imagen de Savarkar como punto central de su campaña hacia las elecciones legislativas en Maharashtra, previstas para octubre.
Los legisladores de Bharatiya Janata también aprovecharon el incidente para boicotear las discusiones en el parlamento sobre el paquete presupuestal del gobierno, que incluye importantes inversiones sociales. El proyecto fue aprobado sin la participación del partido hinduista.
El Partido del Congreso, considerando la importancia de ganar en Maharashtra, se distanció de la actitud de Aiyar, y el propio Manmohan Singh afirmó en una conferencia de prensa este mes que consideraba a Savarkar un patriota y un luchador por la libertad.
Un triunfo en Maharashtra le daría a Bharatiya Janata el impulso moral que necesita tras el impacto de la derrota en las elecciones de mayo, atribuida por los dirigentes más radicales a un supuesto alejamiento del partido de su ideología nacionalista hindú.
Por otro lado, el Partido del Congreso y sus aliados de izquierda atribuyen su victoria al éxito de su campaña por la defensa del carácter laico del Estado.
En definitiva, el Partido del Congreso ensalza en su campaña los ideales de Gandhi, mientras Bharatiya Janata lucha por rehabilitar los postulados de Savarkar y presentarlo como una alternativa a la política del gobierno.
El último episodio en esta guerra de íconos políticos e históricos, el partido Rashtriya Swayamsevak Sangh, vinculado con Bharatiya Janata, presentó una demanda contra el ministro de Desarrollo y Recursos Humanos, Arjun Singh, por haber acusado a esa fuerza política de estar relacionada con el asesinato de Gandhi.
El ministro había dicho en una convención nacional del partido de gobierno a comienzos de este mes que India podía esperar muy poco de una organización (Rashtriya Swayamsevak Sangh) cuyo principal logro fue el homicidio de Mahatma Gandhi.
Arjun Singh no se retractó de sus dichos luego de ser demandado por difamación.
Los vínculos entre Nathuram Godse, el asesino de Mahatma Gandhi, con Rashtriya Swayamsevak Sangh eran lo suficientemente evidentes en 1948 como para que ese grupo político fuera proscripto por el gobierno de entonces. La proscripción duró más de un año.
No obstante, Rashtriya Swayamsevak Sangh siempre negó estar relacionado con el magnicidio.
Una de las razones por las cuales Bharatiya Janata recurre a figuras históricas y asuntos nacionales es que varios de sus partidos regionales aliados han expresado malestar por actitudes del pasado.
El Partido Telugu Desam, del sudoriental estado de Andhra Pradesh, atribuyó la derrota electoral de mayo a la campaña antimusulmana de Bharatiya Janata de 2002 en el occidental estado de Gujarat, aún gobernado por el partido prohindú, como los grandes estados de Madhya Pradesh (centro) y Rajastán (noroeste).
La persecución antiislámica en Gujarat comenzó luego de que una turba de musulmanes matara en febrero de ese año a 59 hindúes al incendiar un tren lleno de fieles que regresaban de la ciudad de Ayodhya.
Los simpatizantes del partido nacionalista pretendían construir un templo sobre las ruinas de la mezquita de Babri, demolida por radicales hindúes 10 años antes.
Las represalias contra los musulmanes dejaron más de 2.000 muertos y 150.000 desplazados. Activistas de derechos humanos y dirigentes islámicos acusaron al gobierno estadual encabezado por Bharatiya Janata de tolerar e incluso alentar la persecución antiislámica.
El partido hindú aún paga el costo de su política en Gujarat. Una encuesta de opinión divulgada el domingo por la revista India Today, vinculada a Bharatiya Janata, reveló que el partido del Congreso gana cada vez más adeptos en todo el país.
Recurrir a figuras históricas como Savarkar parece ser la nueva estrategia de supervivencia del Bharatiya Janata.