Una audiencia convocada para discutir el aumento del precio del gas en Argentina, ya acordado entre el gobierno y los productores, fue suspendida abruptamente este jueves por presión de consumidores y legisladores, quienes alegaron que el presidente Néstor Kirchner fue extorsionado por petroleras para fijar ese incremento.
La reunión pública fue organizada por el Ente Nacional Regulador del Gas (Energas) para considerar la normalización de precios internos del gas natural, sólo para grandes consumidores en un principio, y para ello se invitó a funcionarios, delegados de las empresas privadas del sector, legisladores y consumidores para que expusieran sus posiciones.
No queremos ser parte de un circo, si el gobierno está presionado que suspendan la audiencia, dijo a IPS Gimena Bruna, de la Unión de Usuarios y Consumidores.
El argumento de los consumidores y legisladores fue tomado de declaraciones del propio Kirchner realizadas el miércoles en Estados Unidos. Las compañías nos quisieron extorsionar diciéndonos 'dennos precio y nosotros les damos volumen' de combustible, denunció.
Kirchner también aseguró que las firmas privadas taparon pozos que estaban funcionando, para alcanzar sus objetivos. Eso me lo reconocen en privado y se ríen, remarcó indignado.
Repsol (la firma española que adquirió la otrora empresa estatal argentina Yacimiento Petrolíferos Fiscales) obtuvo 2.600 millones de pesos (905 millones de dólares) de ganancias en el último ejercicio. ¿Así que no han tenido dinero para hacer inversiones?àEs una falta de respeto, subrayó.
Estas expresiones de Kirchner llevaron a que también este jueves un grupo de 15 organizaciones no gubernamentales de consumidores, que había decidido no seguir participando de la audiencia aunque el cuarto intermedio se levantara, presentaran una denuncia ante la justicia por el delito de extorsión de que habría sido víctima el mandatario.
Nuestro presidente fue objeto de una clara maniobra extorsiva (de parte de las empresas privadas) para lograr aumentos (del precio) del gas en boca de pozo, se indica en el texto, al que se le adjuntan ediciones de este jueves de diarios en los que se transcriben las declaraciones de Kirchner en Estados Unidos.
Piden, además, que se investigue y se determine quienes son los responsables de la presunta maniobra y que se los detenga inmediatamente, porque ese delito no contempla la excarcelación de los autores.
Mientras, el diputado socialista Héctor Polino apuntó que las audiencias, según lo establece la Constitución, deberían ser convocadas antes de acordarse los aumentos de tarifas. Por eso, entiende que una farsa para convalidar los ya previstos para grandes consumidores.
Polino también afirmó que Repsol-YPF obtuvo 300 por ciento más de utilidades netas que las registradas por su casa matriz en España, y que existen gasoductos ociosos en 15 por ciento de su capacidad de traslado.
No es cierto que estén saturados, añadió, para concluir en que el gobierno debe exigir que cumplan (sus compromisos las empresas) o en caso contrario rescindir los contratos.
Finalmente, luego de marchas y contramarchas, el ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, Julio de Vido, en acuerdo con Kirchner, resolvió posponer la audiencia hasta que se estudie el asunto en una reunión a realizarse este viernes con todas las partes en la sede del gobierno, con miras a formar un equipo de trabajo para buscar acuerdos.
La reunión había comenzado la mañana de este jueves luego que la justicia rechazara un recurso de amparo de la Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Argentina, en la que se reclamaba que se cancelaran los aumentos, ya convenidos entre el gobierno y las empresas y que entrarán en vigencia el lunes próximo, y que se suspendiera la audiencia.
Los consumidores señalaban en esa presentación judicial que el nuevo acuerdo de tarifas viola la ley en vigor en la materia, porque permite un aumento gradual en el precio del gas para el consumo interno hasta equipararlo al valor de exportación, que va acompañado de la cotización del dólar.
Argumentaron, además, que la audiencia convocada por Energas estaría desnaturalizada porque la decisión de aumentar los precios ya había sido adoptada.
Integrantes de las asociaciones de usuarios consideraron que la convocatoria se hizo para cumplir con la ley que ordena llamar a este tipo de reunión pública para autorizar aumentos, pero, como la asamblea no es vinculante, sus posiciones iban a ser ignoradas ante la resolución ya adoptada de aumentar precios.
La audiencia, de la que participaban unas 300 personas, se inició en un clima tenso por el rechazo judicial al recurso de amparo.
El subsecretario de Combustibles, Cristian Folgar, explicó que el acuerdo con las empresas garantizaría el abastecimiento de gas natural a los grandes consumidores sin afectar a usuarios residenciales.
Pero el ambiente se enrareció aún más luego de que el diputado opositor Mario Cafiero planteara la necesidad de suspender la audiencia ante la gravísima denuncia hecha por Kirchner. Están secuestrando el gas y piden como rescate el aumento de precios, dijo el representante de la centroizquierdista Afirmación para una República de Iguales.
Para Cafiero, la declaración del presidente fue muy valiente pero debe ser acompañada por un sinceramiento de la situación y es que en Argentina no falta gas ni hay restricciones a la capacidad de transporte, sino (que es) una presión para aumentar los precios.
Argentina dispuso a comienzos de este año restricciones a las exportaciones de gas para paliar el déficit en la distribución interna, provocando una fuerte disputa con Chile y reclamos de Uruguay.
Las palabras de Cafiero fueron recibidas con aclamaciones por representantes de los consumidores, quienes pidieron que se pospusiera la reunión considerada por ellos una pantalla para legalizar los aumentos. Uno de los activistas, en muestra de rechazo a la audiencia, llegó a vaciar una botella de agua mineral sobre productores que esperaban su turno para hablar.
El defensor del Pueblo, Eduardo Mondino, solicitó entonces la suspensión de la asamblea, pero el directorio de Energas ratificó en ese momento su continuidad en medio de los gritos e insultos de las organizaciones de usuarios. Finalmente, se resolvió convocar a un cuarto intermedio, que proseguirá hasta que el grupo al que aspira formar Kirchner llegue a una solución.
Kirchner declaró también el miércoles en Nueva York que las firmas petroleras resolvieron exportar gas natural a Chile por 20 millones de metros cúbicos diarios en vez de abastecer el mercado interno como indica la ley, y dijo que esas compañías siguen en Argentina por los altos niveles de rentabilidad que tienen.
En tanto, en Buenos Aires, Sandra González, representante de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios Argentinos (Adecua) consideró que, si es así como dijo, el presidente debe dar marcha atrás con decisiones adoptadas a puertas cerradas, llevando a la audiencia hechos consumados.
González sostuvo que si Kirchner denuncia una extorsión lo vamos a apoyar, pero entonces no pueden autorizar los aumentos, señaló.
El precio de gas en boca de pozo se cotiza a 50 centavos de dólar por millón de BTU (la medida inglesa que equivale a 27 metros cúbicos por unidad). En ese valor permanece desde diciembre de 2001, cuando cada dólar se cotizaba a un peso argentino. Pero en enero de 2002 se devaluó la moneda nacional para llegar hoy a 2,89 pesos por cada divisa estadounidense.
Las empresas privadas de servicios públicos, en particular las gasíferas, comenzaron entonces a presionar para que el gobierno permitiera aumentar las tarifas, mientras mantenían exportaciones de gas a Brasil, Chile y Uruguay con valores en dólares, lo cual llevó a que hoy sean tres veces más altos que lo que se cobra para el consumo interno del país.
Este año, ante la crisis energética que sobrevino por las dificultades de proveer a las industrias locales, se ordenó restringir esas exportaciones y bajar el consumo doméstico.
Pero, paralelamente, el gobierno denunció que las firmas productoras no habían realizado las inversiones requeridas en exploración, un hecho que hizo bajar el horizonte de reservas de 40 a nueve años. También se señaló que distribuidoras y transportadoras no emprendieron obras de infraestructura fundamentales para la red local.
A pesar del debate, el Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, a través de la Secretaría de Energía, autorizó en abril aumentos para los grandes usuarios enun cronograma hasta llegar 100 por ciento a fines de 2005.
Las residencias y pequeños consumidores no tendrán aumentos en una primera etapa, pero sí les llegaría a partir de una fecha aún no establecida, de modo de equiparar todo el sistema a fines de 2006. (
