La Comisión Europea, brazo ejecutivo de la Unión Europea (UE), defendió la decisión de postergar el establecimiento de metas a largo plazo para el impulso de fuentes renovables de energía.
La Comisión dijo que el bloque no podrá cumplir el objetivo autoimpuesto en 1997 de extraer 22 por ciento de su energía de fuentes renovables para 2010.
El órgano ejecutivo decidió, por lo tanto, dejar sin efecto las gestiones para establecer metas rumbo a 2020, con el argumento de que eso no sería apropiado ante la incertidumbre respecto de las metas para 2010.
Entre las fuentes renovables de energía figuran la solar, la eólica, la procedente de ondas marinas, la biomasa y el hidrógeno.
Según la decisión de la Comisión, el cuerpo deberá esperar hasta 2007 para establecer los objetivos más allá del plazo de 2010. De todos modos, las metas no son obligatorias, sino que se trata apenas de guías para los países miembros.
Para 2010, la proporción de energía de fuentes renovables había llegado a seis por ciento, ante 40 por ciento del petróleo, 23 por ciento del gas natural, 15 por ciento de los combustibles sólidos y 16 por ciento de la generación nuclear.
La Comisión Europea pronostica ahora que, dadas las políticas y medidas nacionales existentes, los 15 viejos miembros de la UE —el 1 de este mes se reincorporaron 10 más— habrán logrado en la fecha estipulada que apenas 18 por ciento de su energía proceda de fuentes renovables.
Y apenas cuatro países del bloque —Alemania, Dinamarca, España y Finlandia— están en camino de alcanzar las metas establecidas a nivel nacional en el marco de las acordadas en 1997.
Al defender la decisión, la comisaria de Transportes y Energía, Loyola de Palacio, rechazó la posibilidad de fijar metas para 2020. Yo podría hacerlo: me voy de Bruselas dentro de cuatro meses. Pero sería intelectualmente deshonesto establecer objetivos para 2020 en esta etapa, dijo.
Varias organizaciones ambientalistas cuestionaron la decisión por considerarla irresponsable.
Las metas son el cimiento sobre el cual se construyen políticas renovables. El actual objetivo expira en 2010, por lo que establecer metas nuevas a largo plazo para 2020 continúa siendo una necesidad urgente, dijo Mark Johnston, de la filial europea de Amigos de la Tierra Internacional.
La próxima Comisión debe actuar correctamente sobre la base de los fracasos de la actual. La revisión obligatoria de la directiva en materia de energía renovable que se cumplirá el año pasado debe ser atendida desde ahora, de modo de establecer metas de largo plazo, agregó.
Giulio Volpi, del Fondo Mundial para la Naturaleza, dijo que luego de varios años como comisaria De Palacio aún parece ignorar que la energía eficiente y renovable puede ayudar a reducir las cuentas de Europa.
La Comisión Europea sostuvo que los esfuerzos hacia el cumplimiento de los objetivos están en el buen camino pero no son suficientes, y que deberían desarrollarse esquemas mejorados de apoyo.
El órgano ejecutivo propone ahora establecer acciones concretas adicionales a nivel nacional y comunitario para que los países puedan acercarse a los objetivos.
La Comisión propone que la promoción de energía de fuentes renovables se integre plenamente a los fondos estructurales y de cohesión de la UE, así como a los programas de cooperación internacional, sostuvo en una declaración.
La Comisión calculó que se requieren inversiones por entre 15.000 y 20.000 millones de dólares anuales para alcanzar el objetivo de 2010 en los 15 miembros más antiguos de la UE.
Estas medidas fueron tomadas en el momento adecuado, cuando europa afronta un nuevo aumento de los precios petroleros y toma medidas para batir las emisiones de gases invernadero. Aún es tiempo para que los países cambien sus políticas sobre energía renovable, sostuvo De Palacio.
La energía eólica es, por lejos, la que crece con más rapidez en Europa, con Alemania, España y Dinamarca a la cabeza. Debería suministrar 50 por ciento de la energía de fuentes renovables de Europa, sostuvo la comisaria.