Una película de producción alemana, francesa, pakistaní, sueca y holandesa, protagonizada por una actriz india y enfocada en la historia del extremismo islámico fue la ganadora este año del premio Leopardo de Oro, en Suiza.
El filme ”Khamosh Pani” (”Agua silenciosa”) es una lograda mezcla de talentos de diversos países y la primera obra de repercusión internacional dirigida por la cineasta pakistaní Sabiha Sumar.
”Agua silenciosa” fue presentada por primera vez en el verano boreal de 2002 en Pakistán, pero su lanzamiento mundial fue en la edición 56 del Festival Internacional de Cine de Locarno, Suiza, a mediados de agosto.
La obra cuenta la historia de Ayesha, una mujer de mediana edad cuya vida está centrada en su hijo Saleem, un joven soñador y tierno, enamorado de una muchacha llamada Zubeida. Todos viven en la pacífica aldea de Charkhi, en la central provincia de Punjab.
La historia transcurre en 1979, cuando Pakistán era gobernado por el general Zia Ul Haq y estaba en marcha una campaña de islamización en todos los sectores de la sociedad.
En ese ambiente, Saleem decide unirse a una organización extremista islámica y abandonar a Zubeida.
Allí el relato se remonta a 1947, cuando India y Pakistán, hasta entonces una sola colonia británica, se separaron al independizarse.
El pasado golpea a la aldea de Saleem, cuando peregrinos llegan buscando a familiares secuestrados en 1947 por miembros de organizaciones islámicas. Esto despierta rencores entre las distintas étnias y pronto Charkhi queda envuelta en el caos.
La película se inspira en hechos reales. Estadísticas oficiales indican que unas 50.000 mujeres musulmanas y 33.000 de las etnias sikh e hindú fueron secuestradas por organizaciones extremistas islámicas tras la división de India y Pakistán, pero se estima que el número podría ser aun mayor.
El papel de Ayesha es interpretado por la india Kirron Kher, esposa del legendario actor Anupam Kher. Por primera vez en el festival de Locarno, el premio a la mejor actuación femenina fue repartido entre tres: la estadounidense Holly Hunter, por ”Thirteen” (”Trece”), la rumana Diana Dumbrava, por ”Maria”, y Kirron Kher.
”Es una película única. Fue una gran experiencia haber trabajado en un filme como éste”, dijo Kher a IPS en Londres.
El filme fue coproducido por las compañías Flying Moon Filmproduction, de Alemania, Unlimited SA, de Francia, Vidhi Films, de Pakistán, ZDF/Das Kleine Fernsehspiel, de Suecia, y Arte, de Holanda.
Sumar preparó la filmación con una larga investigación histórica, que incluyó reuniones con los miembros del llamado Grupo de Recuperación, creado para encontrar a las mujeres que fueron secuestradas por los grupos islámicos a fines de los 40.
Los miembros de ese grupo contaron ”historias horribles”, recordó la cineasta, quien sin embargo aclaró que nunca intentó hacer una crítica al fundamentalismo religioso.
”Los fundamentalistas también tienen derecho a expresarse y deben ocupar su lugar en la sociedad. En mi película, lo que quiero subrayar son las consecuencias de que la vasta mayoría de la población y sus líderes políticos dejen el poder a una minoría de fuerzas religiosas”, indicó Sumar.
Con el régimen de Zia, ”la islamización se filtró en todo, y a partir de entonces la sociedad pakistaní se volvió más conservadora y restrictiva”, dijo la cineasta, quien en ”Agua silenciosa” intentó consignar ese cambio.
Nacida en la meridional ciudad de Karachi en 1961, Sumar viajó a Nueva York para estudiar cine y ciencias políticas en el Colegio Sarah Lawrence entre 1980 y 1983. Sus primeras obras fueron documentales para el Canal 4 de Pakistán.
”Agua silenciosa” ya tuvo repercusión internacional, pero aún tiene problemas de distribución dentro de Pakistán.
La historia que cuenta es perturbadora y desempolva hechos pasados que muchos quieren olvidar. Es una historia que vale la pena ser contada. (