Sunil Pokharel, sentado en su casa de la capital de Nepal, busca la manera de despertar de su letargo a los dirigentes políticos y al público, que no consideran la pandemia del sida un problema en este país de las montañas del Himalaya.
Pokharel, un actor veterano, realiza los últimos retoques al guión de una pieza teatral que su grupo representará en aldeas nepalíes en los próximos dos meses.
El propósito es señalar a la población agrícola, en su mayor parte analfabeta, que no está a salvo de la infección del VIH (virus de inmunodeficiencia humana, causante del sida), y los medios de evitarlo.
Su grupo de teatro, "Arohan", que ha ganado popularidad, fue elegido junto con otros por la oficina local del Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD) para la representación callejera en las aldeas una serie de dramas educacionales sobre el sida.
Las primeras representaciones se ofrecieron el mes pasado, al cumplirse la Década Internacional para la Erradicación de la Pobreza, una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas. Las actuaciones seguirán hasta el Día Mundial del Sida, el 1 de diciembre.
"La oficina nepalí del PNUD pretende que se otorgue prioridad en la agenda nacional al combate contra el VIH/sida. Queremos que la amenaza sea conjurada a tiempo, porque todo esfuerzo para la erradicación de la pobreza puede ser anulado por el sida", explicó un representante de la agencia.
Según el PNUD, el virus del sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida) agrava la pobreza en los países en desarrollo y determina la desviación hacia programas de atención de los enfermos de recursos extraordinarios, que podrían ser usados en educación, desarrollo agrícola y en otros esfuerzos por mejorar las condiciones de vida.
Nepal no está inmune, advirtieron los especialistas en salud. Hay alrededor de 32.000 personas infectadas con el VIH. Los mismos expertos señalaron que naciones pobres como Nepal, donde la mayoría de la población vive con menos de un dólar por día, tienen que estar especialmente alerta ante la amenaza del sida.
La pobreza facilita la propagación del virus del sida en el país. Al respecto, los expertos mencionaron el tráfico en gran escala de mujeres nepalíes a los burdeles de las grandes ciudades de India.
Uno de los nueve distritos escogidos para montar las representaciones callejeras es Makwanpur, cerca de la frontera con India.
Mujeres jóvenes de la zona son atraídas a India con falsas promesas de trabajo. En Makwanpur, el grupo "Taranga" interpretará "Junge Hawaldaar", una obra de una hora que usa la comedia para transmitir mensajes importantes.
"Nuestra pieza ofrece entretenimiento, provoca risa. Debemos asegurarnos de que los espectadores disfruten el espectáculo. Al mismo tiempo, les pasamos información y mensajes que los pondrán en guardia, los hará pensar", comentó Ujwal Sharma, de Taranga.
Animadas por improvisaciones, las representaciones muestran cómo inocentes muchachas aldeanas son atraídas por bandas organizadas de traficantes que les ofrecen trabajo en las grandes ciudades de India y luego las venden a proxenetas.
Taranga exhibe la obra hace más de un año. Pinta la dura vida del burdel y el peligro del VIH/sida, al que están expuestas las mujeres obligadas a prostituírse.
También los aldeanos nepalíes casi iletrados que en creciente cantidad buscan trabajo temporal en ciudades de India, donde pueden entrar en contacto con mujeres infectadas, sobre todo en los burdeles, son potencialmente agentes de contagio.
"El problema en Nepal es la negación. El sentimiento de que 'no estoy en ese grupo, el asunto (el sida) no me concierne', es general", advirtió Anita Pandey, funcionaria de comunicación del PNUD. "Todos, en cualquier país, corren riesgo de infectarse", agregó.
"Cómo se contrae, las medidas de prevención, los mitos acerca del sida y las características de la enfermedad, serán materia de las representaciones callejeras, en un lenguaje directo y con mensajes repetidos, sin entrelíneas», dijo Pandey.
El gobierno anunció hace cinco años una estrategia nacional para combatir la enfermedad y, con ese propósito, destinó 22.000 dólares al Centro Nacional de Control del Sida, el instituto oficial responsable de implementar la campaña.
Pero esa cantidad apenas alcanza para pagar los salarios, señalaron los funcionarios del centro. El gobierno depende en gran medida de donantes internacionales. La Organización Mundial de la Salud ha entregado 400.000 dólares al centro para el período 2000- 2001.
Las representaciones callejeras de educación sobre el sida tienen el objetivo de estimular la demanda pública de mayor iniciativa del gobierno en la materia, aunque los artistas admiten que comunicar el mensaje no será fácil.
"La connotación sexual asociada con el sida y el hecho de que su manifestación tras el contagio puede demorar varios años dificultan nuestra tarea», observó Pokharel.
Agregó que los actores deben sacrificar elementos artísticos para poner mayor énfasis en el mensaje. "Es gratificante cuando, después de la función, la gente quiere saber más sobre el mensaje que intentamos transmitir», dijo el actor que, junto con su esposa Nisha, ha viajado por Nepal montando obras sobre cuestiones de desarrollo.
Su grupo, radicado en Katmandú, utiliza a menudo actores de aldeas locales, a quienes les imparte formación artística. "El teatro callejero es un poderoso medio para llamar la atención. Sin embargo, debe seguirse un programa, porque no se puede esperar que la situación cambie despues de una sola actuación", puntualizó Pokharel.
El grupo Arohan, de Pokharel, se inspiró en el éxito de otra obra educativa sobre sida, montada por el conjunto Taranga y dirigida a los camioneros que circulan por las carreteras nepalíes.
"Guruji Ra Antare", la pieza presentada por Taranga, trata de un conductor y de su ayudante, y el primero le dice al otro cómo y por qué debe usar condones.
"La representamos muchas veces en lugares vecinos a la carretera. Se hizo muy popular. Un padre y su hija pueden verla al mismo tiempo sin avergonzarse", aseguró Sharma, de Taranga. (FIN/IPS/tra-eng/rl/mu/ego-ff/he cr/00
