El conservador Partido Acción Nacional (PAN) de México cumple 60 años con la certeza de que si en este momento se celebraran las elecciones presidenciales, programadas para el 2000, su candidato acabaría con 70 años ininterrumpidos de gobiernos del PRI.
Fundado el 15 de septiembre de 1939, el PAN, hasta hace poco acusado de colaborar con el PRI (Partido Revolucionario Institucional) y de manejar un discurso de corte moralista, muestra hoy un cara remozada, mientras sus dirigentes radicalizan su discurso opositor.
Todas las encuestas indican que el PAN, que se proclama pragmático, humanista y a favor del libre mercado, acaricia de cerca la meta de llegar al poder de la mano de Vicente Fox, carismático ex director de la compañía Coca-Cola, ex gobernador del estado de Guanajuato y hoy candidato presidencial.
Según las encuestas, Fox, de 57 años, es el favorito de los electores para los comicios presidenciales del 2 de julio del 2000.
Alto, de bigote, siempre con botas, cinto ancho y rara vez de traje, el candidato presidencial del PAN es un "peligroso cowboy", dicen los dirigente del PRI, para quienes él es el único candidato a vencer en el 2000.
"Vamos a sacar a patadas" al PRI de los Pinos (la casa de gobierno) proclama Fox. "No soy dogmático, soy pragmático. No tengo ideología, hago política. No soy caudillo, hago equipo", dijo.
La imagen del Fox alegre, mal hablado y de frases simples y directas contrasta con la proyectada por otros dirigentes y militantes del PAN, que se proclaman católicos y custodias de la moral y las buenas costumbres.
En el pasado, en algunos municipios y estados donde gobierna el PAN se prohibió a las funcionarias usar minifalda y se censuró obras de teatro y exposiciones de pintura y de fotografía donde hay referencias al sexo.
La dirigencia del PAN reconoce que Fox es su mejor carta y que con él por fin llegarán a la presidencia a realizar su proyecto político. En cuanto al discurso moralista, la orden parece ser que se retire de la escena.
"Han sido 60 años de bregar, de lucha ardua, difícil, incomprendida", de la que hoy deriva "una posibilidad real de llegar a la presidencia, lo que demuestra que no se aró en el mar", señaló Luis Alvarez, ex candidato presidencial, senador y dirigente del PAN.
Hoy, el PAN gobierna 287 municipios, entre ellos 12 capitales de estado, y seis estados. Además, tiene 121 diputados y 31 senadores. De los 96 millones de mexicanos, 32,7 millones son ahora gobernados por este partido, calculan sus dirigentes.
Junto al centroizquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), el PAN arrebató en 1997 al PRI, por primera vez en la historia, la mayoría en la Cámara de Diputados.
Antes enfrentados por cuestiones ideológicas y por el apoyo del PAN a algunos planes económicos del gobierno, las dirigencias de ambos partidos opositores mantienen hace varias semanas un diálogo con el objetivo de conformar una alianza opositora y presentar un solo candidato en el 2000.
Los dos partidos conformaron esta semana un Consejo Ciudadano independiente para definir la forma y el tiempo en que se se elegirá al candidato.
La dirigencia del PRI considera imposible que PAN y PRD se puedan unir, pues eso equivaldría, dicen, a mezclar agua y aceite.
El PRD postula a la candidatura presidencial a Cuauhtémoc Cárdenas, actual gobernador de la capital y líder histórico de la centroizquierda, pero las encuestas le dan pocas oportunidades frente a Fox.
Los dos candidatos dicen que aceptarán la coalición y que renunciarán a su candidatura si es del caso, pero Cárdenas mantiene una actitud crítica hacia Fox, lo que los observadores interpretan como un afán por salvar una postulación sin popularidad.
Si PAN y PRD no logran un acuerdo "dejaremos otra vez la mesa servida al PRI", advirtió el diputado Santiago Creel, del PAN.
José Antonio González, presidente del PRI, aseguró que su partido ganará en el 2000, otra vez y como siempre, la presidencia de México.
El partido oficial realizará el 4 de noviembre una elección interna para escoger a su candidato entre cuatro contendientes. (FIN/IPS/dc/mj/ip/99