Nicaragua aceptó ayuda cubana en medicinas para las víctimas del huracán Mitch, pero rechazó el ofrecimiento del presidente Fidel Castro de enviar una brigada de médicos.
Un grupo de médicos cubanos llegó a Honduras el miércoles, y otro estaba listo para viajar a Nicaragua, pero Managua respondió a La Habana que por el momento "tiene cubiertas" esas necesidades.
Castro, quien apareció la noche del miércoles en las pantallas de televisión, cuando cumplía una visita al Instituto Nacional de Meteorología, comentó que no deseaba "polemizar ni responder ofensas" a una pregunta sobre la posición nicaragüense.
Cuba "ha ofrecido a Nicaragua ayuda médica y en medicinas en correspondencia con nuestro rico potencial humano y nuestras posibilidades materiales", dijo el mandatario en un mensaje al pueblo nicaragüense.
El mensaje, firmado en la sede del Consejo de Estado, omite toda referencia a la respuesta negativa del presidente de Nicaragua, Arnoldo Alemán, pero recuerda la ayuda que Cuba ofreció en 1972, cuando un terremoto destruyó Managua.
Médicos cubanos trabajaron en Nicaragua durante los años del gobierno sandinista de Daniel Ortega (1979-1990). La ayuda oficial de la isla se hizo efectiva también en 1988, cuando el huracán Juana atravesó territorio nicaragüense.
Observadores locales creen que la negativa de Alemán a recibir médicos cubanos se debe a motivos políticos.
El periódico mexicano La Afición afirmó en junio de 1996 que el ya fallecido líder radical del exilio cubano en Miami, Jorge Más Canasa, habría financiado gran parte de la campaña electoral de Alemán.
La Habana y Managua mantuvieron fricciones diplomáticas en abril de 1997, cuando Alemán incorporó a un cubano anticastrista radicado en Estados Unidos a la delegación nicaragüense ante la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
En mayo de este año, Alemán se puso nuevamente junto a los sectores radicales del exilio al abrir las puertas de su país a los refugiados cubanos en Bahamas que, según los acuerdos vigentes entre La Habana y Nassau, eran repatriados a Cuba.
Por último, el presidente de Nicaragua hizo aún más clara su posición cuando el mes pasado, en la octava Cumbre Iberoamericana, celebrada en Oporto, Portugal, anunció que no viajará a La Habana para participar en la novena cumbre.
"Yo quiero muchísimo a los nicaragüenses". Alemán "está invitado y estará siempre invitado a Cuba", dijo Castro a la prensa durante la reunión de Oporto.
El presidente cubano anunció que en las primeras horas de este jueves saldría hacia Nicaragua una tonelada de medicamentos, en su mayoría producidos por las industrias biotecnológica y farmaceútica cubanas.
Otra brigada médica y un grupo de epidemiólogos viajó este jueves a Guatemala, el gobierno cubano hizo un ofrecimiento similar de ayuda especializada a El Salvador y estudia la posibilidad de enviar una segunda brigada a Honduras.
El paso del huracán Mitch por América Central causó 23.000 víctimas, entre muertos y desaparecidos, y pérdidas económicas que podría significar un atraso de 30 años para los países de la región.
En el octavo año de una severa crisis económica y bajo los efectos de varios fenómenos climáticos este año, Cuba puede ser de gran ayuda para las víctimas de desastres naturales como el Mitch si se aprovecha su capital profesional.
El sistema de salud pública cubano contaba a finales de 1997 con un médico cada 176 habitantes, según la Oficina Nacional de Estadísticas.
Una brigada médica cubana de 13 especialistas y técnicos permanece en República Dominicana desde el 27 de septiembre, cuando llegó para auxiliar a víctimas del huracán Georges.
Sobre el desastre ocasionado por Georges en Haití, Castro dijo que Cuba estaría dispuesta a "poner todos los médicos que hacen falta para ese pueblo", siempre que se pudiera contar con recursos de Canadá, la Unión Europea o Japón.
Este miércoles aseguró que, si algunas naciones europeas estuvieran dispuestas a financiar un programa de salud en América Central, Cuba aportaría los profesionales necesarios. (FIN/IPS/da/ff/he/98
