Desde la alfabetización hasta la Universidad, el programa de Educación en la Prisión puesto en práctica por el gobierno de la capital de Brasil está reinsertando socialmente a 400 detenidos de la cárcel de Papuda.
Participan en el proyecto 18 profesores, que cuentan cpn 36 monitores en las salas de enseñanza, y colabora la Universidad Católica de Brasil, que no cobra la tasa de inscripción y permite realizar los exámenes dentro de la misma cárcel.
Un censo penitenciario realizado en 1994 por el Consejo Nacional de Política Criminal y Penitenciaria, del Ministerio de Justicia, reveló que 54,63 por ciento de los reclusos brasileños no tienen terminado el primer año de enseñanza primaria.
En el Distrito Federal de Brasilia la situación es aún más grave. Se estima que 70 por ciento de los 1.950 presos que pueblan la cárcel de Papuda, con una edad promedio de 23 años, son analfabetos o semi analfabetos.
El proyecto de Educación en la Prisión fue uno de los 100 proyectos seleccionados para la segunda etapa del programa "Gestión Pública y Ciudadanía" de la Fundación Getúlio Vargas, en conjunto con la Fundación Ford.
"La verdad es que nuestras prisiones se han convertido en depósitos de seres humanos, y hasta son llamadas universidades del crimen por el estado en que los presos viven, sin posiblidades de recuperarse y progresar", afirmó el director ejecutivo de la Fundación de Amparo al Trabajador Preso (Funap) del Distrito Federal, Angelo Roncalli de Ramos Barros.
"Existe un sentido de punición muy grande con relación al preso. Pero nosotros queremos contemplar la reinserción social, proporcionado los medios para que el preso tenga estímulo para mejorar de vida y volverse un ciudadano", añadió. (FIN/IPS/dv/98
