Una docena de niños de la calle de Kenia lanzaron una operación relámpago en las calles de la capital, para pintarla de rojo, azul y verde y amarillo y naranja, en el marco de un proyecto que combina el arte y el mensaje social.
La "Operación dar brillo a Nairobi", que cuenta con el respaldo de siete artistas de este país, comenzó por el embellecimiento del muro de casi 70 metros de longitud del Cuartel Central de Bomberos, uno de los más grandes de la ciudad.
Las pinturas de estos jóvenes artistas pretenden llamar la atención de los habitantes de la capital sobre la difícil situación de unos 60.000 niños y niñas que viven en las calles de Nairobi.
Así mismo, la pintora Valerie Buyu, quien dirige el proyecto, espera que los fondos recaudados por la realización de los murales sirvan para rehabilitar a algunos de estos niños.
"A la mayoría de los habitantes de Kenia no les importa que haya niños indefensos en las calles. Para ellos son una plaga y es necesario erradicarlos. Por eso es necesario que alguien luche por los derechos de esos menores, por su derecho a existir", dijo Buyu, de 19 años, participante en la campaña.
"Además de recaudar fondos para ayudar a los niños, esta operación mejorará la apariencia de Nairobi, sensibilizando a sus habitantes acerca de la importancia de vivir en un ambiente más agradable, y por cierto sobre la necesidad de apoyar proyectos que mejoren la calidad de vida", agregó.
La mayoría de los muros de Nairobi están adornados con viejos carteles a medio desprenderse y con graffiti que tienden a desvanecerse. "Algunas de estas paredes fueron pintadas por última vez cuando las construyeron", observó Buyu.
"Me sorprende que a la gente le guste nuestro trabajo", comentó Marion Nyambura, de 15 años, quien vivía en las calles de Nairobi. Ahora es estudiante de diseño en la Casa de Rescate Dada, en las afueras de la ciudad,
"Si acaso mis manos y mis pinceles pueden ayudar a otros niños a dejar las calles, estoy dispuesta a trabajar para hacer que los sueños se transformen en realidad", dijo Nyambura.
Al igual que la mayoría de los niños de la calle de Kenia, Nyambura procede de un hogar desintegrado en el cual su madre, una vendedora de vegetales, es jefa y único sostén. Sus tres hermanos andan por las calles, tratando de encontrar un destino.
La "Operación dar brillo a Nairobi" fue lanzada por el vicealcalde de la ciudad, Mohammed Ogle. La pared del cuartel de bomberos atrae a un número creciente de personas, que miran el avance de la obra, y que, según Buyu, "están recibiendo el mensaje de las pinturas".
La cantidad de niños y niñas de la calle aumentó en Nairobi de 3.600 en 1989 a 60.000 en la actualidad, de acuerdo con un estudio divulgado en 1997 por la Agencia Alemana de Cooperación Técnica.
Mientras, el total de niños sin hogar en los principales centros poblados del país se incrementó de 115.000 en 1975 a 150.000 en 1997, según el mismo informe.
El presidente Daniel Arap Moi prometió una ley para hacer frente a las necesidades de los niños. Entre otras cosas, la ley crearía un consejo encargado de coordinar todas las actividades a favor de la infancia.
Entre tanto, la "Operación dar brillo a Nairobi" deja su marca, y atrae la atención de algunos sectores empresariales. Los materiales utilizados fueron donados por una empresa fabricante de pinturas.
"La Coca Cola nos da el almuerzo y las bebidas, mientras que el Servicio de autobuses nos entrega pasajes gratis para venir al trabajo", destacó Buyu.
Pero los promotores de la campaña también presentaron a empresas y particulares una propuesta específica. "Por 1.600 dólares, pueden financiar un espacio de nueve metros en los muros a pintarse, en el que se consignará a cambio su nombre o logotipo, como gesto de agradecimiento", explicó.
Una de esas empresas, representante de la transnacional de computación Oracle, decidió ir un poco más allá de la oferta de Buyu y, además de comprar sus nueve metros, decidió financiar la educación informática de cinco niños de la calle, a quienes dará empleo cuando finalicen sus estudios.
"No se trata de reunir una pocas monedas y dar a los niños un almuerzo gratis, sino de atacar la raíz de los problemas" advirtió Buyu. (FIN/IPS/tra-en/pn/pm/lc-ff/cr/98