La industria automovilística de Brasil logró un récord de producción al fabricar 2.067.452 vehículos en 1997, superando en 14,58 por ciento el resultado del año anterior, que fue de 1.804.328 unidades.
La Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores (ANFAVEA) divulgó la cifra este jueves, en medio a una crisis en el sector, que espera una caída de 25 por ciento en la producción del actual trimestre.
La producción y las ventas disminuyeron en los dos últimos meses del año pasado, como consecuencia de las medidas de austeridad que el gobierno dispuso para contener la fuga de capitales extranjeros provocada por la turbulencia financiera en Asia.
En diciembre, el sector fabricó sólo 110.903 vehículos, 15,56 por ciento menos que en igual mes de 1996. La industria concedió vacaciones colectivas a los obreros y 1.264 trabajadores perdieron su empleo.
La industria automovilística instalada en Brasil terminó el año con un total de 116.750 empleados, 1,5 por ciento más que al final de 1996, pero con la amenaza de despidos masivos en la empresa Volkswagen de Brasil, la mayor del sector.
El mes pasado, la Volkswagen propuso a sus empleados una reducción de 20 por ciento de la jornada semanal de trabajo y también del salario, como forma de evitar el despido de 10.000 de sus 31.000 trabajadores.
La propuesta fue rechazada por el Sindicato de Metalúrgicos del ABC, conjunto de ciudades industriales en la periferia de Sao Paulo donde se ubican las mayores plantas del sector. Para evitar los despidos se acordaron negociaciones, que finalizarán la semana próxima, y estímulos a la renuncia voluntaria.
Más de 1.000 obreros ya se incorporaron a ese programa de retiro voluntario.
La compañía Fiat, que en los últimos cuatro meses estuvo a la cabeza entre los fabricantes de automóviles de Brasil, superando por primera vez a la Volkswagen, anuncie que podría conceder nuevas vacaciones colectivas en febrero, tras prolongar las de fin de año hasta el próximo domingo, para mantener sus 24.000 empleados.
La tercera montadora, General Motors, también prorrogó las vacaciones y anunció que reanudará la producción el lunes, con una jornada semanal de trabajo reducida de 42 a 38 horas, en su planta de Sao Caetano do Sul, cerca de Sao Paulo.
En otra fábrica, de Sao Jose dos Campos, a cien kilómetros de Sao Paulo, General Motors mantendrá aún durante un mes en licencia remunerada a 427 obreros. El objetivo es reducir entre 20 y 25 por ciento la produccin, sin despidos.
Las medidas son de emergencia. Si el gobierno no ablanda las decisiones que tomó en noviembre, y especialmente si no reduce las tasas básicas de interés, que están en 38 por ciento al año, la recesión económica y la caída de las ventas harán difícil impedir la reducción de personal en el sector.
La industria automovilística logró en 1997 aumentar 39 por ciento sus exportaciones, pero ese resultado se debió especialemente a los acuerdos de comercio sectorial con Argentina y se trata de ventas que no compensan las pérdidas en el mercado interno. (FIN/IPS/mo/ff/if/98