Giovanni Umberto Agnelli, joven heredero de la FIAT, el mayor imperio económico italiano, murió hoy en la nórdica ciudad de Turín a los 33 años víctima de un cáncer, según informó el portavoz de la familia.
El sobrino del presidente honorario de la FIAT, Giovanni Agnelli, murió en la casa de su padre Umberto, al norte de Italia, a consecuencia de "una rara forma de tumor, contra la cual luchó desde marzo último", precisó el vocero.
Los funerales se efectuarán de manera absolutamente privada, agregó.
Giovanni Agnelli había anunciado en 1995 que su sobrino era "el más calificado de la familia" para sucederlo a la cabeza del grupo.
A los 29 años había asumido la presidencia de la Piaggio, una de las más importantes empresas constructoras de motos, de propiedad también de la familia, por parte materna.
Mientras tanto, había sido nombrado presidente de la FIAT Cesare Romiti, quien dentro de un par de años debería haber renunciado al cumplir los 75.
El límite de edad lo estableció, y fue el primero en ponerlo en práctica Giovanni Agnelli, que pasó a ser presidente honorario.
A los 18 años, con otro nombre, durante las vacaciones de verano, Giovanni Umberto había trabajado como obrero en un grupo de la FIAT.
"Lo hice, para conocer desde abajo la empresa", comentó en su momento.
Había estudiado economía en una universidad estadounidense. Aunque era multimillonario, acostumbraba a moverse en Vespa, la motoneta creada por la Piaggio.
En una entrevista al diario de propiedad de la familia, uno de los más importantes de Italia, La Stampa, "Giovannino", como lo llamaban, había anunciado en abril último que sufría de una "forma rara de tumor abdominal".
Poco tiempo después viajó a Nueva York para operarse en uno de los centros médicos más avanzados.
El 24 de agosto regresó a Italia y la familia informó en un breve comunicado que sus condiciones de salud eran "estacionarias".
El 16 de septiembre, su esposa, la estadounidense Avery Howe, le dio su primer hijo, la niña Virginia Asia.
La última vez que apareció en público fue el miércoles pasado en la tribuna del estadio Delle Alpi, de Turín, para el partido de fútbol por una copa europea entre Juventus, perteneciente a la FIAT, y el equipo inglés del Manchester.
Los dirigentes del mundo político y empresarial expresaron su pesar por la muerte de "Giovannino", así llamado también para diferenciarlo de su tío Giovanni Agnelli.
El presidente de la Confederación General de Trabajadores (CGIL), la más grande de las tres que existen en Italia, Sergio Coferatti, sostuvo que la muerte del empresario torinés representa "una pérdida para el país".
"Lo conocí hace algunos años en su calidad de responsable de la Piaggio, y me pareció de inmediato una persona de gran capacidad, muy abierta, respetuosa de las necesidades de sus interlocutores, lo cual, para dirigir una empresa, es importante", señaló. (FIN/IPS/jp/dg/if/97)
