Cerca de 35 por ciento de las jóvenes de América Latina tienen su primer hijo antes de cumplir los 20 años, situación que configura serios problemas de salud y salud reproductiva para ese creciente sector de la población.
A pesar de los compromisos adoptados por los gobiernos en la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo, realizada en El Cairo en 1994, la población adolescente de América Latina y el Caribe sigue sin recibir los servicios y la información necesaria para decidir sobre su vida sexual.
Kristen Trone, subdirectora del Fondo de Naciones Unidas para la Población (FNUAP), indicó que el embarazo precoz es una cuestión que requiere urgente solución porque genera en las niñas y jóvenes problemas de salud, de educación y de acceso al trabajo.
Trone participa en Costa Rica en la Conferencia Regional sobre Salud Sexual y Reproductiva de la Adolescencia, promovida por el FNUAP.
La reunión comenzó este lunes y concluirá este miércoles con una serie de recomendaciones tanto para gobiernos como para la sociedad civil, de modo de avanzar en el cumplimiento de los compromisos adoptados en la cumbre de El Cairo.
Varios obstáculos impiden el cumplimiento de los acuerdos de El Cairo en materia de salud sexual y reproductiva de la población adolescente, según el FNUAP.
Uno de estos problemas es la cultura de la violencia "que ha introducido un sentido de inseguridad que no fomenta el respeto a la integridad de la persona" ni tampoco al ejercicio de sus derechos a la salud sexual y reproductiva.
Otro escollo es la falta de oportunidades sociales para mujeres, jóvenes, niños y poblaciones indígenas, que repercute en el grado de satisfacción y de acceso a las demandas de salud sexual y reproductiva.
El FNUAP preparó un informe regional, basado en informes nacionales, titulado "Salud Sexual y Reproductiva de los Adolescentes: Un Compromiso con el Futuro", con la finalidad e exponer una visión global sobre el problema.
Según este estudio, la población adolescente de América Latina y el Caribe oscila entre 15,2 por ciento en Cuba y 25 por ciento en Nicaragua, donde la mitad de la población tiene menos de 17 años.
En México, la población comprendida entre los 10 y 19 años es de 20 millones, cifra que representa 23 por ciento del total de habitantes. Se prevé que entre el 2000 y el 2020 la poblacion de 10 a 19 años será el grupo de edad más numeroso en términos absolutos.
A diferencia de otras regiones como Asia o Africa, donde los adolescentes carecen de todo, en América Latina los jóvenes tienen educación y algunas buenas condiciones de vida.
Sin embargo, carecen de información y servicios sobre opciones para evitar embarazos no deseados.
A estas razones se atribuye el hecho de que en diferentes países el uso de anticonceptivos entre los adolescentes sea muy bajo. Los métodos más utilizados son el ritmo y la "retirada" (interrupción del coito), que, a juicio de los expertos, representan un mayor riesgo de embarazo no deseado.
El estudio del FNUAP muestra también cómo la educación genera confianza hacia el futuro y hace posible el control de las decisiones respecto al inicio de vida de pareja, el uso de métodos anticonceptivos, el tamaño de la familia y las opciones laborales.
De la misma forma, la falta de educación se asocia con tasas de fecundidad mucho más altas y mayores grados de pobreza.
En Venezuela, por ejemplo, las adolescentes que no han avanzado en el sistema educativo tienen tasas de fecundidad de 173 por mil, mientras que en las que han cursado la primaria la cifra baja a 124 por mil.
Las que logran llegar a la educación media diversificada y profesional muestran una tasa de 77 por mil.
A los jóvenes de América Latina y el Caribe los golpea fuertemente también la pobreza, el ingreso temprano al mercado laboral y la falta de opciones de empleo.
A pesar de los compromisos adoptados por los gobiernos en El Cairo y en la Cumbre por la Infancia para aplicar leyes contra la explotación económica de los menores de edad, la realidad muestra que poco se ha progresado.
Apenas 10,4 por ciento de los trabajadores adolescentes de Colombia tienen acceso a la seguridad social. En República Dominicana uno de cada dos adolescentes entre 10 y 14 años se encuentra en el mercado laboral.
En Nicaragua la situación es aún peor, según el informe. En ese pais 70 por ciento de los niños entre 10 y 14 años participan en el sector informal de la economía. De ellos, 80 por ciento sufren pobreza o pobreza absoluta.
Con este panorama en mano, los expertos de Naciones Unidas y representantes de los países de la región que participan en la Conferencia de San José esperan adoptar una serie de recomendaciones para mejorar la situación de la población del futuro.
"El futuro de los jóvenes dependerá de la situación económica de la región y con la importancia que se le de a este grupo y el reconocimiento de sus derechos", concluyó Trone. (FIN/IPS/mso/mj/pr/97
