Los calendarios de Jamaica han dejado de ser, este año, el simple registro del paso del tiempo.
Desde los que representan a mujeres bien proporcionadas para adornar talleres mecánicos atendidos por hombres, hasta las elaboradas publicaciones que reproducen las características naturales y los rasgos históricos del país, los calendarios han pasado a ser algo más que instrumentos del tiempo.
Los calendarios de las compañías más tradicionales son objeto de cortesía y pueden ser encontrados en las agencias de viajes o en lugares turísticos.
Los calendarios comerciales, por lo general realizados por fotógrafos profesionales, se encuentran a la venta en tiendas minoristas, siendo los más populares los que reproducen chicas bonitas en paños menores. La mayoría de estos últimos están dedicados a la promoción de bebidas alcohólicas.
Desnoes and Geddes, la conocida fábrica de cerveza jamaiquina, comenzó con esta línea a mediados de la década pasada y ahora su calendario es pertenencia obligada de bares y clubes nocturnos de moda.
"El calendario es uno de nuestros instrumentos de venta, utilizamos chicas porque nuestro mercado está dominado por hombres en edades entre 18 y 35 años", dijo Harry Smith, ejecutivo de Desnoes and Geddes.
Smith destacó que no ha habido verdaderos problemas con los grupos feministas a propósito de su calendario, ya que el trabajo artístico es "sumamente caro" y lleva promedialmente seis meses terminar la publicación.
El calendario de la cervecería no está en venta sino que se destina también a la promoción en locales del extranjero, en especial en Estados Unidos y Gran Bretaña, donde esta cerveza compite con cientos de bebidas similares.
Prácticamente lo mismo ocurre con Wray and Nephew, productora de uno de los más famosos licores de Jamaica. Su calendario, que promociona el conocido ron blanco, no es tan caro de realizar.
Según informó Robert Polack, portavoz de la firma, imprimen alrededor de 100.000 copias cada año, las que casi siempre son recogidas por hombres.
Fuera del campo de las muchachas bonitas, hay firmas como la Shell Company que presentan tranquilos paisajes de las pintorescas zonas rurales o lugares famosos de Jamaica. Para la empresa, según Margarite Jackson, no se trata de una inversión rentable.
El calendario de la Shell también es caro de realizar, pero ha logrado ganarse el favor de los jueces en los concursos, donde suele quedar colocado en el primer puesto.
Un portavoz de la compañía dijo que "la naturaleza puede ser cruel. A veces los fotógrafos se pasan meses buscando el lugar perfecto".
Susan Deegan-Crawford, una estadounidense que vive en Jamaica y trabaja como productora independiente, sacó al mercado este año 2.000 copias de su primer calendario con proverbios jamaiquinos, destinado al mercado de los turistas.
"Percibí que los proverbios jamaiquinos estaban en peligro de perderse", explicó Deegan-Crawford. (FIN/IPS/tra-en/hc/mk/arl/cr/97
