El tango triunfa en esta capital de la mano de Malevaje, un grupo musical español encabezado por el madrileñísimo cantante Antonio Bartrina que convoca a numerosos jóvenes españoles y apenas un puñado de rioplatenses.
Malevaje llenó a tope los locales en los que presentó el viernes 17 su disco compacto "Con su permiso, don Carlos".
El grupo enfrentó con éxito el desafío de actuar en el madrileño Palacio de Congresos y Exposiciones, en una sala con 2.500 butacas. Al día siguiente se presentó en la más pequeña del teatro Buero Vallejo, de la cercana localidad de Alcorcón.
Cuando Bartrina canta, es difícil distinguir en su acento la pronunciación rioplatense, pero cuando habla se advierte con claridad su dicción madrileña, cargada de modismos populares propios de su barrio, el castizo Lavapiés, en pleno Madrid antiguo.
El cantante logra establecer un diálogo con el público en el que se entremezclan las más puras expresiones de los arrabales de Buenos Aires o Montevideo con las de sectores populares de la capital española.
En "Garufa", uno de los tangos más clásicos, esa mezcla es notoria. Al igual que en la versión original, se canta: "Tu mama dice que sos un bandido porque dice que te vieron la otra noche…", y uno de los músicos (el público, en las presentaciones de Malevaje) pregunta "¿dónde?".
Pero los cantantes del Río de la Plata contestan "en el parque japonés", un desaparecido parque de diversiones de la zona portuaria de Buenos Aires, mientras Bartrina contesta "en la de Carabanchel", la mayor y más antigua de las cárceles madrileñas, o "en la plaza Lavapiés".
En sus comienzos, 15 años atrás, Bartrina cantaba rock, y precisamente de ese género provienen la mayoría de sus músicos españoles.
Tanto el anterior bandeononistas del grupo, Osvaldo Larrea (hoy en su provincia natal, Mendoza), como el actual, Jorge Lema, son argentinos. Larrea les enseñó mucho, dijo Bartrina. Con él "aprendimos a poner en tango las cosas que nos ocurren a nosotros, las historias de Madrid", explicó.
La pareja de bailarines porteños Marcela y Marcelo, llegados especialmente desde Buenos Aires para la ocasión, acompañó a Malevaje en la presentación del disco.
También estuvo presente el popular artista Joaquín Sabina, con quien Bartrina cantó a dúo "Mano a mano", y el guitarrista Raimundo Amador, quien sostuvo un contrapunto con el bandoneonista Lema.
Una de las canciones más aplaudidas por el público, junto con "Garufa", fue "Arroz blanco", que, según Bartrina, tiene mucho de autobiográfica.
En ella cuenta las desdichas fuera del hogar y reclama: "¡Qué desolación me da/ ver la nevera vacía/ con lo bien que yo comía/ en casa de mi mamá!".
El cantante entiende que la gente de Buenos Aires es muy parecida a la de Madrid, que ir de una ciudad a otra es como cambiar de barrio y que, en todo caso, "el tango es patrimonio de la humanidad". (FIN/IPS/td/mj/cr/96
