El estado de Kerala, al sur de India, marca el ritmo de una nueva política nacional que incorpora al sistema de salud pública la milenaria ciencia medicinal Ayúrveda en un esquema de "médicos descalzos".
Tras reconocer el año pasado el fracaso de los servicios de salud pública, el entonces ministro de salud A.R. Antulay anunció una serie de medidas políticas para promover a los 550.000 practicantes registrados de medicina Ayúrveda y otros saberes tradicionales.
La política comenzó a aplicarse en Kerala, un estado poco permeable a la influencia exterior que mantuvo viva la tradición de los "vaidyanes" (maestros médicos), enseñando a alumnos y tratando pacientes en santuarios conocidos como "ashrams".
En el ashram Santhigiri, por ejemplo, pacientes con enfermedades consideradas crónicas por la medicina alopática son curados rutinariamente por médicos ayurvédicos bajo la supervisión de su maestro de 70 años, Guru Karunakaran.
Siguiendo la mejor tradición ayurvédica, Guru Karunakaran busca las causas espirituales subyacentes en enfermedades como reumatismo, diabetes, epilepsia y disfunciones cardíacas, y puede prescribir tratamientos psíquicos que parecerían irracionales para la medicina alopática.
Aunque este ashram es famoso por su terapia de vidas anteriores, la cual no tiene costo alguno, en general las curas se hacen a través de una amplia gama de hierbas, masajes con aceites diversos y baños de vapor, a costo nominal.
Cuando los médicos del prestigioso Hospital Universitario Trivandrum le dijeron a Saraswati Amma, de 50 años, que su pie ulcerado debería ser amputado, la paciente decidió dirigirse al ashram Santhigiri para contar con una segunda opinión.
"Me alegro de haber aceptado sugerencias para que lo intentara con el hospital ayurvédico", dijo la paciente. No sólo salvó su pie, sino que las curas con hierbas permitieron un control permanente de los niveles de azúcar en su sangre.
Para la diabetes, la principal droga recetada por los médicos en el ashram es "Panchamridwekarasa", un rejuvenecedor del páncreas cuyos ingredientes son cuidadosamente elaborados en su farmacia.
Aunque las medicinas producidas en Santhigiri incluyen hierbas raras y valiosas, se cobran a bajo precio porque están exentas de impuestos.
En Kerala, el gobierno estatal tiene un gesto especial, y reembolsa las medicinas recetadas en el ashram Santhigiri, indicó Anantha Rama Iyer, a cargo de la red de distribución de los ashrams.
Con el respaldo del gobierno para introducir el saber ayurvédico en la atención primaria de la salud, el ashram Santhigiri instaló un proyecto piloto en el aislado distrito de Palakkad.
Palakkad, típicamente, tenía doctores alópatas e instalaciones de diagnóstico concentradas en áreas urbanas, mientras la gente en villas remotas debía arreglárselas por sí sola.
Con financiación del gobierno central, se instaló un complejo especialmente destinado a la atención maternoinfantil, con seis clínicas satélites y 33 centros móviles que cubren a 50.000 personas en 120 kilómetros cuadrados.
Según el médico director Shyam Prasad, los preparativos de hierbas incluyen "Balasarvangam", una medicina pediátrica para el sistema nervioso que actúa como profiláctico de la poliomielitis y la cura en las primeras etapas.
Además, es buena contra el tétanos y las convulsiones, y como relajante respiratorio en casos de asma y tos convulsa, indicó Prasad, especialista calificado en neurología alopática.
La terapia de rehidratación oral, promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para salvar vidas de neonatos es indicada en antiguos textos ayurvédicos, utilizando azúcar no refinado y sal de roca, dijo el director del proyecto, R. Gopalakrishnan.
La atención de la madre tras el parto incluye un período de tres meses de masajes con aceites, compresas y tónicos de hierbas para restaurar el peso del cuerpo y el tono muscular. También hay hierbas para tratar complicaciones como abortos prematuros y en condiciones sépticas.
Además, el santuario Santhigiri tiene una línea de medicinas naturales para la salud reproductiva y la anticoncepción que se adecúan a los programas de planificación familiar "sin las complicaciones hormonales de las pastillas o la cirugía", dijo Gopalakrishnan.
Las granjas que brindan servicios de salud ya son un negocio establecido en Kerala, con sus masajes rejuvenecedores y saunas populares entre turistas que visitan la región.
Para el gobierno central, la ciencia ayurvédica se presenta como la solución para las nuevas disparidades creadas por las reformas de libre mercado que han hecho inaccesible la medicina alopática para la amplia mayoría de los indios.
"Estamos redescubriendo los méritos del Ayurveda y su popularidad entre la gente", dijo el ministro federal de Salud, Salim Shervani, en una reunión con ministros estatales realizada para comprometer fondos presupuestales a reavivar este sistema en un plan quinquenal que comenzará este año. (FIN/IPS/tra-en/rd/an/lp/he/97
