El gobierno de Costa Rica reforzará un plan de reforestación para contrarrestar los efectos del manejo y explotación de los bosques, anunció hoy el ministro de Ambiente y Energía René Castro.
"Desgraciadamente consumimos más de lo que la naturaleza tiene capacidad de reponer", argumentó Castro al tiempo que aseguró la decisión del gobierno para lograr en 1997 un punto de equilibrio entre las tasas de explotación maderera y los planes de reforestación.
Hasta el momento no existen datos concretos del porcentaje de deforestación en el país, señaló, pero según cifras preliminares se estima que entre 1993 y 1994 el fenómeno afectó a unas 4.000 hectáreas por año.
"Esperamos que durante este año la tasa de deforestación sea cero", dijo Castro.
Destacó en ese sentido el inicio de una campaña para incentivar plantaciones de árboles.
El Ministerio de Ambiente y Energía prohibió por su lado la explotación de especies de árboles nativas y la imposición de "severos" castigos para quienes corten, transporten o almacenen madera en forma ilegal.
Unas 18 especies se encuentran protegidas para evitar su extinción.
En 1990, un estudio regional elaborado por el Instituto de Recursos Mundiales, con sede en Washington, determinó que Costa Rica era el país de América Central que más dióxido de carbono producía por cambios en el uso de la tierra.
Tirso Maldonado, de la Fundación Neotrópica, una organización ambientalista, dijo que a partir de ese estudio, el gobierno de Costa Rica prometió la creación de un mapa forestal, que aún no ha sido realizado.
Según datos del Ministerio de Ambiente, hasta 1993 el área autorizada para aprovechamiento forestal era superior en casi 2.000 hectáreas al área reforestada. A partir de 1994, las áreas plantadas superan a las destinadas para el consumo autorizado en 8.000 hectáreas. (FIN/IPS/yo/dg/en/97
