El gobierno de Colombia aceptó hoy el establecimiento de un diálogo bilateral propuesto por las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC) para negociar la liberación de 60 soldados retenidos desde hace cerca de cinco meses.
"Este es un elemento nuevo que abre vías constructivas hacia una solución definitiva", afirmó el consejero presidencial Carlos de Roux, comisionado del gobierno para el proceso de entrega de los militares, en respuesta a un mensaje del grupo insurgente del día 9.
No obstante, el gobierno advirtió que no ha pensado en la posibilidad de despeje de la localidad de Remolinos del Caguán (sur de Colombia), la principal exigencia de las FARC para la liberación de los soldados.
En una carta dirigida al presidente Ernesto Samper, las FARC indicaban que la entrega de los soldados sólo podrá ser resultado de un acuerdo bilateral y "no de ofertas o acciones unilaterales del Estado".
Para el ex canciller Diago Uribe, la posición que han asumido las FARC y el gobierno de buscar una negociación bilateral, es la "única vía posible" para lograr el regreso de los soldados a sus hogares.
Uribe, miembro de la Comisión Nacional de Conciliación (que busca facilitar una negociación de poaz con la guerrilla) indicó que el obstáculo del despeje militar se puede superar buscando otro lugar en zona neutral.
Los 60 soldados fueron retenidos por las FARC durante el ataque a un puesto militar de la localidad de Las Delicias, del departamento sureño de Putimayo el 30 de agosto último.
Este lunes el diario estadounidense Miami Herald pidió a la comunidad internacional no olvidar la situación de los soldados y afirmó que mientras el mundo tiene los ojos puestos en los 74 rehenes de la embajada de Japón en Lima militares colombianos de entre 18 y 20 años están cautivos en la selva.
El rotativo destacó que tanto Samper como su par de Perú Alberto Fujimori se han rehusado a negociar con las respectivas guerrillas. (FIN/IPS/yf/dg/ip/97
