El gobierno mexicano rehusó hoy la mediación del Vaticano y reveló nuevos choques de sus fuerzas de seguridad con guerrilleros del Ejército Popular Revolucionario (EPR), que a su vez llamó a la población a "generalizar la autodefensa armada".
Simultáneamente se conocieron informes del Ministerio de Defensa estadounidense, hasta el 26 de agosto pasado "confidenciales", donde se estima en 37 el número de grupos armados que operan en 15 de los 32 estados mexicanos.
La Secretaría de Gobernación (Ministerio del Interior de México) respondió negativamente la oferta de la Iglesia Católica de mediar entre las autoridades y el EPR.
Su vocero Rafael Rodríguez Barrera, subsecretario de Asuntos Religiosos, dijo que el EPR es un grupo que perpetró actos de delincuencia, por lo que no puede ser tratado como parte de un conflicto político.
"Lamentablemente no hay partes en este problema, porque los incidentes ocurridos no revelan un deseo, un planteamiento social para el gobierno, ya que han sido sólo hechos delictivos, ante los que el Estado tiene el deber de aplicar la ley", afirmó.
Adujo que el gobierno mexicano no puede aceptar el ofrecimiento de mediación, formulado los últimos días por la Iglesia a través de declaraciones de varios de sus dignatarios, pero que lo toma como una muestra de afecto y simpatía del Vaticano.
En el estado de Oaxaca, al este de la ciudad de México, se registró el miércoles un choque entre una veintena de efectivos del EPR que viajaban en una camioneta y tropas del ejército regular que montaron un retén, con saldo de al menos un herido de bala.
Trescientos soldados con apoyo de blindados y helicópteros iniciaron enseguida una intensa búsqueda en la región circundante al lugar de los hechos, que se prolongará por varios días.
El documento rebelde, difundido con amplitud en la prensa, sostiene que el presidente Ernesto Zedillo declaró la guerra al EPR en su mensaje anual al Congreso del día 1, al anunciar que lo reprimiría con "toda la fuerza del Estado".
"No nos interesa el reconocimiento del gobierno ni nos asustan las acusaciones con que intenta descalificarnos, manipular sentimientos populares, aislarnos y justificar nuestro aniquilamiento", señala.
"En el marco de la autodefensa popular nada pedimos, ni aceptamos nada que venga de este mal gobierno", señala el comunicado, fechado este martes.
Acusa a la autoridad de ser "quien despliega el terrorismo como política de Estado", y subraya que "es el gobierno terrorista de la oligarquía el que asesina de manera cobarde a los luchadores sociales".
Al mismo tiempo trascendieron documentos del Pentágono estadounidense, recientemente desclasificados de su condición de "confidencialidad", según los cuales 37 grupos "subversivos guerrilleros" operan en México.
Los documentos califican de "engañosa e irreal" la idea de que el gobierno mexicano puede dar una solución represiva militar rápida al complejo problema político del cual es síntoma el surgimiento de la lucha guerrillera.
Citando a la Agencia de Inteligencia Militar del Ministerio de Defensa de Estados Unidos, el diario mexicano El Financiero dice que, según los informes secretos, los grupos armados irregulares capitalizan el descontento social ante la crisis económica.
El estudio del Pentágono prevé que si el gobierno de México no encara el problema de la desigualdad social podría verse amenazado el diálogo de paz que mantiene desde hace 32 meses con otra guerrilla, la del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Según el análisis de la inteligencia estadoundense, además del EZLN, que irrumpió en escena el primer día de 1994 en el sureño estado de Chiapas, hay en estado de "latencia" otros 12 grupos armados subversivos en esa misma entidad provincial.
En el estado sureño de Guerrero, donde hizo su primera aparición pública el EPR el 28 de junio último, el Pentágono detectó tres grupos guerrilleros con unos 150 efectivos en armas.
De acuerdo con el informe otras tres organizaciones existirían en el estado de Oaxaca, y en el de Hidalgo, al norte de la capital mexicana, habría nueve.
Otros estados con guerrillas serían Puebla, Sinaloa, Chihuahua, Nuevo León, Michoacán, Jalisco, Baja California (Norte y Sur), Veracruz, Sonora y el estado de México, que rodea a la capital del país, así como la misma metrópoli.
El análisis de la inteligencia estadounidense señala la existencia de organizaciones subversivas en 15 de los 32 estados del país, desde la frontera norte con Estados Unidos hasta la sur con Guatemala.
El subcomandante Marcos, líder y vocero del EZLN, anunció este martes desde su base en Chiapas que el movimiento guerrillero zapatista suspendió su participación en el proceso de diálogo de paz con el gobierno.
Puso como requisitos para reanudarlo un cambio de la delegación gubernamental, la libertad de los presos políticos y el funcionamiento de un organismo supervisor de la aplicación de los acuerdos que se vayan logrando. (FIN/IPS/emv/dg/ip/96