El gobierno de Costa Rica lanzará en los próximos días una campaña nacional e internacional con el fin de comprar terrenos que servirán para proteger el desove de la tortuga baula.
El ministro de Ambiente y Energía René Castro dijo este martes que los fondos recogidos permitirán adquirir una franja de 75 metros de ancho por seis kilómetros de largo donde se establecerá una barrera verde, de manera que la iluminación proveniente de poblaciones vecinas no llegue a las playas de desove.
Cerca de mil hembras baula (Dermochelys coriacea) llegan anualmente a tres playas del pacífico norte de Costa Rica a poner sus huevos, pero en los últimos años se han desplazado básicamente a dos de ellas por el desarrollo turístico en la tercera.
La barrera verde que se piensa construir permitiría mantener en las playas la oscuridad que requieren las tortugas para no extraviarse en su retorno al mar.
Costa Rica tiene el área de desove más importante de América Latina en el área del Pacífico, por lo cual el gobierno creó el Parque Nacional Las Baulas.
El turismo es un factor que afecta fuertemente a esta especie, ya que los visitantes llegan en la noche y toman fotografías que ciegan a las hembras.
Para reducir el problema se establecerán dos puestos de información a la entrada del parque advirtiendo a los turistas que deben llegar en silencio y sin cámaras fotográficas que dañen a los animales.
La tortuga baula es una especie en extinción. En 1980 la población mundial se calculaba en 115.000 ejemplares, pero ahora ronda apenas los 40.000. (FIN/IPS/mso/dg/en/96)
