presidente colombiano Ernesto Samper a la formación de un gobierno "de reconciliación" profundizó la división del opositor Partido Conservador y señaló el alcance de las diferencias internas en el oficialista Partido Liberal.
Una fracción del Partido Conservador anunció la creación de su propio comité de dirección después de apoyar la propuesta de Samper, quien lanzó su invitación a los partidos políticos al ser absuelto por la Cámara de Diputados del caso de infiltración de dinero del narcotráfico en la campaña electoral de 1994.
Los disidentes, encabezados por el senador Roberto Gerlein y la diputada Isabel Celis, afirman representar la corriente mayoritaria del Partido Conservador.
Gerlein tiene el respaldo de 10 senadores y Celis de 30 diputados, que se comprometieron a colaborar estrechamente con Samper para "facilitarle una salida a la crisis" institucional provocada por las denuncias de apoyo financiero del narcotráfico al liberalismo en la campaña de hace dos años.
El senador Jaime Arias, líder del sector conservador oficial, solicitó al Consejo Nacional Electoral un espacio en la televisión para dar a conocer la posición de su colectividad ante las propuestas de Samper.
Arias fundamentó su pedido en el artículo 112 de la Constitución, que concede a "los partidos y movimientos políticos que no participen en el gobierno" el derecho de "replica en los medios de comunicación frente a tergiversaciones (…) proferidas por altos funcionarios estatales".
En opinión de Arias, el presidente "tergiversó en forma grave hechos de interés nacional" en el discurso que pronunció la semana última tras ser exonerado por la Cámara de Diputados de los cargos de corrupción que le endilgaba la Fiscalía.
Si Samper continúa en la presidencia "hasta el último minuto del último día" del periodo para el que fue elegido, como lo ha asegurado, los conservadores ortodoxos le presentarán una "oposición racional e inteligente", para constituirse en alternativa política, dijo Arias.
No obstante, el senador aclaró que su colectividad no se ha pronunciado sobre las iniciativas legislativas anunciadas por Samper, pues aún las analiza, y podría apoyarlas en caso de detectar "cosas buenas" en ellas.
Mientras, el grupo liberal dirigido por el vicepresidente Humberto de la Calle se encuentra "en proceso de reflexión" para decidir su actitud ante la nueva etapa política abierta con la aboslución parlamentaria de Samper, informaron fuentes del gobierno.
De la Calle, embajador de Colombia en España, tiene el apoyo de un sector minoritario del Partido Liberal que pidió, al agudizarse la crisis institucional, el reemplazo de Samper por el vicepresidente.
Samper también tuvo durante la crisis la fuerte oposición del ex presidente César Gaviria (1990-1994), que dirige otra corriente interna del liberalismo.
Pero la positiva actuación del gobierno para la liberación del secuestrado Juan Gaviria, hermano del ex presidente, neutralizó al parecer a ese grupo interno. César Gaviria aseguró a la revista española Cambio16 que no tomará posición de momento en el debate interno del Partido Liberal.
Mientras, el ex ministro de Comercio Juan Santos, también liberal, anunció que no participará del gobierno de reconciliación propuesto por el presidente.
"No voy a participar en el gobierno pues existen diferencias de principio que me lo impiden", dijo Santos, quien preside la no gubernamental Fundación Buen Gobierno.
A su juicio, no habrá solución a la crisis desatada por las denuncias contra Samper sin la previa renuncia del mandatario. Santos exigió "una cirugía mayor" en el área política, para "la recuperación de la gobernabilidad'.
Samper aclaró el domingo que no busca "coleccionar" aliados políticos, sino generar acuerdos para hacer posible el ajuste institucional necesario para superar la crusis.
El presidente anunció la creación de "una comisión de reflexión", encargada de estudiar los temas que serán llevados al Congreso, entre los que se cuentan el endurecimiento de la lucha contra el narcotráfico, la reforma de los organismos de orden público y el fortalecimiento del programa social.
Samper rechazó el martes la renuncia protocolar presentado por sus ministros, con quienes continuará gobernando de momento. Pero según el ministro del Interior, Horacio Serpa, puede haber "ajustes" en las próximas semanas.
Los cambios se producirían en la medida en que se concrete el respaldo político a la propuesta de reconciliación presentada por el mandatario, indicó una fuente gubernamental. (FIN/IPS/yf/ff/ip/96)
