La Organización de las Naciones Unidas (ONU) determinó hoy que el bombardeo israelí del mes último a un campo de refugiados en Líbano fue deliberado, aunque Israel sostiene lo contrario.
Pese a las presiones para cambiar el veredicto, principalmente de Estados Unidos, una investigación encabezada por el asesor militar Franklin van Kappen ofreció pruebas de que Israel atacó intencionalmente el campo de refugiados de Qana, a cargo de la ONU, el pasado 18 de abril.
El campo fue alcanzado por 13 bombas, y más de 100 civiles libaneses murieron en el ataque, entre ellos mujeres y niños, de acuerdo con funcionarios de ONU.
"La característica de los impactos hace improbble que el bombardeo de la base de ONU haya sido provocado por errores técnicos y/o de procedimiento", escribió el secretario general Boutros Boutros-Ghali en nota enviada al Consejo de Seguridad. (FIN/IPS/tra-en/fah/ml/ip/96)
