Representantes de la industria y de la banca de Alemania se oponen a las sanciones impuestas por Estados Unidos a Cuba, que también son cuestionadas abiertamente por parlamentarios de los dos principales partidos del país.
Heinz Mewes, analista económico del Banco Germánico para América del Sur, de Hamburgo, señaló este jueves a IPS que las relaciones cubano-estadounidenses han empeorado sensiblemente.
Mewes afirmó que las sanciones económicas suelen carecer de sentido y en este caso concreto resultan "exageradas".
Mientras, el consorcio Daimler Benz, de Stuttgart, mantiene su interés en ampliar sus relaciones con Cuba, pese a la llamada ley Helms-Burton, que fortaleció el embargo económico impuesto por Estados Unidos a la isla desde 1962.
Daimler Benz suministró el último año a Cuba dos centenares de motores para máquinas cosechadoras de caña de azúcar.
Mercedes Benz, miembro de ese consorcio, abrió en julio oficinas en La Habana para atender sus negocios de largo plazo, con el propósito de reanudar sus actividades en Cuba cuando lo permita la situación, informaron a IPS fuentes allegadas a esa empresa automovilística.
Así mismo, empresarios germanos inauguraron hace tres meses en La Habana la Asociación Económica Alemana en Cuba, para apoyar sus actividades en la isla.
Las sanciones comerciales estadounidenses fueron también rechazadas por Otto Hauser, presidente del Grupo Germano- Latinoamericano del parlamento federal alemán.
Según Hauser, de la gobernante Democracia Cristiana, el embargo afecta en primer lugar a la población y no conducen a su declarado objetivo de contribuir al restablecimiento de las libertades democráticas. En su opinión, es contraproducente intentar el aislamiento de Cuba.
En cambio, el comercio puede generar cambios internos profundos tanto en Cuba, como en Irán y en Libia, otros dos países sancionados por Estados Unidos.
El intercambio comercial germano-cubano oscila alrededor de 67 millones de dólares y, dada la crisis económica de Cuba, resultará díficil que aumente en el corto plazo.
A manera de comparación, el intercambio de Alemania con Irán fue de enero a septiembre de 1995 del orden de 1.687 millones de dólares, y con Libia, de 1.495 millones.
El diputado Hauser aseguró que la ley Helms-Burton, cuya aplicación podría afectar a firmas alemanas, transgrede normas jurídicas internacionales.
Friedhelm Ost, también democristiano y presidente de la Comisión Económica de la Cámara de Diputados, Alemania debe dialogar con Estados Unidos en defensa de los derechos y la posición de Europa en la cuestión cubana.
Ost señaló que Europa no quiere aislar a Cuba y considera que el comercio y la cooperación econónica son buenos medios para promover la democracia, el respeto de los derechos humanos y la economía de mercado.
Friedhelm Julius Beucher, portavoz del Grupo de Amigos de Cuba del bloque socialdemócrata, considera que la ley Helms-Burton constituye "un retorno a la Edad Media y no satisface las necesidades que hoy plantea al mundo la globalización de las relaciones internacionales".
Estados Unidos, que "mantiene o ha mantenido relaciones comerciales y diplomáticas con China y numerosas dictaduras militares latinoamericanas", pierde credibilidad "cuando invoca la defensa de los derechos humanos para boicotear a Cuba", advirtió Beucher.
El diputado socialdemócrata solicitó al gobierno de Helmut Kohl que coordine una respuesta con la Unión Europea y siga una vía independiente de Estados Unidos en materia de relaciones con Cuba.
A fines de abril, Alemania y Cuba firmaron en La Habana un tratado de protección y fomento de inversiones, que aún debe se ratificado por el parlamento alemán. El gobierno de Kohl ha suscrito acuerdos similares con numerosos países, incluso de América Latina.
Ya estan en vigencia tratados de transporte aéreo y marítimo firmados por Bonn y La Habana, y Cuba mantiene convenios del mismo tipo con Canadá, España, Italia y Gran Bretaña.
El presidente Roman Herzog firmó en Nicaragua un tratado bitaleral de protección y fomento de inversiones, y Alemania se propone suscribir acuerdos de idéntica naturaleza con México y Chile.
Varias compañías privadas alemanas realizan vuelos semanales direectos a cuatro destinos en Cuba. Alemania aporta aproximadamente 10 por ciento del flujo turístico que llega a la isla. (FIN/IPS/as/ff/ip/96).
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