Parlamentarios y activistas reaccionaron con indignacion ante el anuncio del gobierno de Gran Bretana de su rechazo a la solicitud de asilo politico presentada por uno de los mas destacados opositores del regimen monarquico de Arabia Saudita.
Mohammad al-Masaari, lider del Comite para la Defensa de los Derechos Legitimos (CDDL), un influyente grupo saudita islamico con sede en Londres, habia solicitado asilo politico en este pais el pasado ano.
Sin embargo, el gobierno rechazo este jueves su pedido y le dio un plazo de diez dias para apelar contra su destierro hacia la isla caribena de Dominica. De lo contrario, Al-Masaari debera presentarse en el aeropuerto londinense de Gatwick para su deportacion el 19 de este mes.
Aunque el CDDL emplea metodos pacificos, es considerado en Riyadh como una amenaza para la estabilidad del regimen, aunque este cuenta con un enorme aparato de seguridad y con aliados estadounidenses, senalo Charles Tripp, especialista en asuntos de Medio Oriente de la Escuela Universitaria de Estudios Orientales y Africanos, de Londres.
"El CDDL utiliza faxes, casetes y otros medios electronicos para difundir su mensaje islamico dentro de Arabia Saudita, e intenta dejar al descubierto la corrupcion y el doble discurso de la familia real", explico Tripp.
"El problema con regimenes como el saudita es que tienen un sistema politico muy cerrado, de extrema sensibilidad a cualquier forma de critica. Cuando esas criticas se producen de forma que no pueden ser controladas, despiertan gran preocupacion en el gobierno sobre sus posibles efectos", agrego el especialista.
Puntualizo, sin embargo, que la importancia y la influencia del CDDL probablemente ha sido exagerada, tanto por sus partidarios como por sus detractores.
No obstante, la expulsion de Al-Massari causo la indignacion de grupos defensores de los derechos humanos, los cuales argumentan que la decision del gobierno britanico puede sentar un precedente peligroso.
La medida "constituye un tragico error en terminos democraticos y economicos para este pais", manifesto George Galloway, un parlamentario laborista escoces que promueve la causa de la oposicion saudi.
"El gobierno se ha inclinado ante el tiranico regimen de Riyadh, que nunca antes parecio mas inseguro", opino Galloway, quien se refirio al reciente traspaso de poder del rey Fahd hacia su medio hermano Abdullah, al atentado con bomba contra una base militar estadounidense en Riyadh el pasado noviembre, y a las luchas internas del regimen saudi.
"Pretendemos combatir esta decision hasta el final, ante la Corte Suprema si es necesario. Creemos que existen graves fallas en el razonamiento juridico del gobierno acerca de esta medida", agrego el parlamentario.
Galloway considera que la decision gubernamental se debio a razones comerciales. Arabia Saudita adquirio el ano ultimo productos britanicos por 2.260 millones de dolares, y esta en el lugar 18 entre los mayores mercados de exportacion de Gran Bretana.
Quiza mas importante aun sea el tratado de intercambio de armas por petroleo por un valor de 30.200 millones de dolares firmado por Margaret Thatcher en 1985, que regira durante los proximos 20 anos.
Tripp concordo con esta opinion. "Las relaciones de Gran Bretana con Arabia Saudita son eminentemente comerciales, y el hecho de que exiliados saudies procuren refugio en este pais para desarrollar sus actividades incomoda mucho al gobierno", dijo.
Por otra parte, algunos grupos defensores de los derechos humanos argumentaron que la medida del gobierno es ilegitima.
"El articulo 32 de la Convencion de Naciones Unidas sobre el Estatuto de los Refugiados establece que los paises contratantes no pueden expulsar a refugiados establecidos legalmente en sus territorios en base a razones de seguridad nacional o de orden publico", destaco Lord Avebury, una parlamentario liberal democrata.
Avebury, quien preside el Grupo de Parlamentarios por los Derechos Humanos, teme que la decision siente un peligroso precedente para otros regimenes cuyos oponentes procuraron refugio en Gran Bretana.
Entre las muchas organizaciones exiliadas que operan desde Londres se encuentran el Movimiento por la Libertad de Bahrain, el Movimiento Paquistani Muhajir Qaumi y varias organizaciones tunecinas y argelinas.
El CDDL, por su parte, emitio una declaracion en la que condena la decision gubernamental. "Siempre hemos creido que Gran Bretana era uno de los refugios mas seguros para aquellos que defienden los derechos humanos, y que nunca comprometeria sus principios. Esta medida, sin embargo, probo lo contrario", dijo.
El propio Al-Masaari manifesto que la decision no pretende simplemente silenciarlo a el como individuo, sino "a todo el CDDL, probablemente para dividirlo y destruirlo".
"Sin embargo, tenemos la intencion de quedarnos todo el tiempo que sea posible y luchar contra esta medida de una forma digna", dijo Al-Masaari a IPS.
"Tenemos un deber hacia el pueblo saudi. Debemos sacar al pais de la oscuridad y convertir a su medieval sistema de gobierno en un regimen razonable y adecuado a nuestros tiempos, en que el pueblo tenga participacion en los asuntos publicos y control sobre su propia vida", anadio el opositor saudi. (FIN/IPS/tra-en/db/rj/ml/ip/96)
