Noruega podria cambiar la orientacion de su politica de asistencia para el desarrollo en detrimento de los paises mas pobres, senalaron organizaciones no gubernamentales (ONG) y expertos en desarrollo.
La comunidad donante internacional siempre reconocio a Noruega por su compromiso con el alivio de la pobreza y su resistencia a las presiones para vincular la ayuda al desarrollo a intereses domesticos, pero existen proyectos que podrian cambiar las prioridades.
Noruega otorga 1,05 por ciento de su producto interno bruto (PIB) en ayuda a paises pobres, lo cual la convierte en el mayor donante proporcional de ayuda al desarrollo, por encima de Dinamarca, Suecia y Holanda.
El presupuesto de asistencia al desarrollo para el proximo ano sera de 1.350 millones de dolares, cifra que supera en 104 millones la del ano ultimo, pero un nuevo plan gubernamental en camino hacia el parlamento sugiere sutiles cambios en esta politica, que tenderia a asemejarse a la de otros paises cooperantes.
El gobierno de Noruega propone agregar a la lista de receptores de ayuda para el desarrollo a China e Indonesia, aunque existen otras naciones en la lista de "paises menos desarrollados" que precisan mucho mas de su asistencia economica.
Ademas de ser dos de los paises con mas rapido crecimiento economico, la situacion de los derechos humanos en China e Indonesia es de las peores del mundo, pero constituyen enormes mercados potenciales para las empresas de Noruega.
"Existe un notable aumento de intereses creados en lo relacionado con la politica del gobierno hacia el Sur", indico Arnfinn Nygaard, coordinador de varias ONG noruegas que reciben apoyo estatal.
"El proyecto gubernamental tiene varios elementos positivos, pero no incluye un analisis de la relacion entre ricos y pobres. La miseria es considerada cada vez mas como un mercado", agrego Nygaard.
El cambio en la politica tambien provoco reacciones entre los partidos opositores. El presidente de los Democrata-Cristianos de Noruega, Kjell Magne Bondevik, ya anuncio que su partido presentara su propio proyecto sobre la politica de cooperacion para el desarrollo.
El nuevo plan gubernamental contradice tambien el firme principio de que la ayuda al desarrollo no debe ser utilizada para tratar problemas ambientales globales en el Sur, dado que la causa de esos problemas se encuentra en el Norte.
Noruega siempre evito tomar fondos de los presupuestos de ayuda para tratar asuntos como el agujero de la capa de ozono y el calentamiento global.
Sin embargo, la industria noruega desarrollo sofisticados productos para la prospera tecnologia de la "limpieza" del medio ambiente. Paises semiindustrializados como China e Indonesia poseen un enorme potencial para tal tecnologia, especialmente si es financiada por la ayuda extranjera.
Las empresas noruegas ya se benefician de los programas de cooperacion. En noviembre, el grupo Kvaerner obtuvo un contrato de 24 millones de dolares por tres turbinas Pelton de 63,5 megavatios para el proyecto de la represa del rio Kihansi, en Tanzania, que seran financiadas por la organizacion Norad AID.
Pese al escepticismo reinante, la ministra de Cooperacion Kari Nordheim-Larsen afirmo que la politica de asistencia para el desarrollo del pais se concentra aun en el progreso economico y social de las naciones pobres.
Sin embargo, los paises receptores deberan adoptar nuevas responsabilidades en el futuro, senalo. La promocion de la igualdad de los generos y del "buen gobierno" de los recursos biologicos y el medio ambiente son tambien objetivos vitales, puntualizo la ministra. (FIN/IPS/tra-en/pa/mom/rj/ml/dv/96)
