La carcel especial de Punta Peuco, que cobro notoriedad en Chile durante 1995 como centro de reclusion del general retirado y ex jefe de los servicios represivos Manuel Contreras, aumento esta semana su poblacion penal a 14 reclusos.
Tres nuevos sentenciados por crimenes contra los derechos humanos ingresaron el miercoles a la carcel situada en las cercanias de Santiago, construida especialmente para miembros de las Fuerzas Armadas y la policia de Carabineros.
Estan aun pendientes en la justicia por lo menos tres casos de crimenes represivos que se cometieron despues de 1978, cuyos fallos podrian derivar en el envio a Punta Peuco de otros uniformados.
Los mas recientes inquilinos del penal son el capitan Pedro Fernandez Dittus, el mayor retirado Carlos Herrera, ambos del Ejercito, y el suboficial de Carabineros Armando Cabrera, condenados por crimenes cometidos entre los anos 1984 y 1986.
Asi se alcanzo un total de 14 presos en el penal, que cuenta con una guardia mixta de militares y de efectivos de Gendarmeria, el servicio dependiente del Ministerio de Justicia a cargo de la administracion y vigilancia de las carceles en Chile.
La guardia mixta, sin precedentes en Chile, se establecio debido a que todos los recluidos en Punta Peuco son militares y policias en actividad o retirados, relacionados con crimenes politicos cometidos durante la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90).
Con excepcion de Contreras y del brigadier Pedro Espinoza, los reclusos de la carcel especial cumplen condenas por delitos cometidos despues de 1980, ya que la ley de amnistia expedida por Pinochet en 1978 dejo en la impunidad los crimenes cometidos desde 1973 hasta ese ano.
Contreras y Espinoza, ex jefes de la Direccion de Inteligencia Nacional (DINA), fueron condenados por el asesinato del ex canciller Orlando Letelier, cometido en Washington el 21 de septiembre de 1976 a traves de un atentado terrorista.
El caso Letelier fue el unico excluido expresamente de la amnistia de 1978, como consecuencia de las presiones que ejercio entonces el gobierno de Estados Unidos sobre el regimen militar chileno.
El recinto carcelario de alta seguridad, ubicado 20 kilometros al norte de Santiago, fue construido a comienzos de 1995, cuando se tornaba inminente la condena de los ex jefes de los servicios represivos como autores intelectuales del asesinato de Letelier.
La Corte Suprema emitio el 30 de mayo la sentencia que condeno a Contreras a siete anos de reclusion, mientras que sobre Espinoza recayo una pena de seis anos.
Espinoza ingreso al penal en junio de 1995, mientras que Contreras demoro su ingreso hasta octubre, recurriendo a una serie de maniobras juridicas y medicas que mantuvieron en suspenso al pais durante casi cinco meses.
Fernandez Dittus fue condenado a 600 dias de presidio por el cuasi delito de homicidio de dos estudiantes universitarios gravemente quemados en 1986 en Santiago, durante una jornada de protesta en demanda del restablecimiento de la democracia.
Uno de los jovenes, Rodrigo Rojas, fallecio dos dias despues del incidente a consecuencia de las graves quemaduras, mientras que su acompanante, Carmen Gloria Quintana, quedo desfigurada.
El mayor Herrera, ex agente de la disuelta Central Nacional de Inteligencia (CNI), fue condenado a 10 anos de carcel junto a Cabrera, por el asesinato en 1984 del transportista democratacristiano Mario Fernandez.
Ambos se encuentran procesados, ademas, por el presunto homicidio del lider sindical Tucapel Jimenez y del carpintero Juan Alegria, en 1982.
Entre los restantes reclusos de la carcel de alta seguridad se encuentran ocho policias autores del secuestro y degollamiento de tres militantes comunistas en 1985.
Con el tiempo, es posible que solo queden en Punta Peuco cuatro de los implicados en este caso, que recibieron condenas a presidio perpetuo.
En medios oficiales se afirma que por el momento no habra mas ingresos a Punta Peuco, pese a que existen procesos en tramite por crimenes represivos no cubiertos por la amnistia de 1978.
Entre estos figura el asesinato de Jimenez, que tiene como uno de sus principales encausados al mayor retirado Alvaro Corbalan, ex jefe de operaciones de la CNI, actualmente en libertad bajo fianza.
Estan pendientes tambien los probables procesos por la llamada Operacion Albania, en que la CNI dio muerte en 1987 a 12 jovenes izquierdistas en un operativo que la propia justicia militar definio en 1995 como homicidio calificado.
Segun organismos humanitarios, Corbalan dirigio esa accion de la CNI, cuerpo represivo que seria tambien responsable de otro asesinato aun no juzgado: el del portavoz del Movimiento de Izquierda Revolucionaria, Jecar Nehgme, en 1989. (FIN/IPS/gl/ag/hd/96) ITEM CLOSED
