Las fuerzas que integran la coalicion de centroizquierda de Italia, cuyo principal componente es el Partido Democratico de Izquierda (PDS), estan de acuerdo en agilizar los tiempos de expulsion de los inmigrantes que cometan delitos.
El PDS cambio su politica sobre la emigracion, que era contraria hasta ahora a aumentar la represion contra los inmigrantes clandestinos, en base a dos conceptos sintetizados este jueves por el responsable de su politica exterior, Piero Fassino: solidaridad y legalidad.
El mensaje que deseamos enviar a la opinion publica, dijo Fassino, es que 95 por ciento de los inmigrantes son personas que viven honestamente, y que para el cinco por ciento restante, que participa en actividades criminales, debe haber una accion represiva.
La coalicion de centroizquierda llego a un acuerdo sobre esta materia con la Liga Norte despues de varias semanas de discusiones. Unidas, ambas fuerzas tienen mayoria en la Camara de Diputados, donde se esta analizando una reforma de la actual ley sobre la emigracion.
El acuerdo incluye normas para la regularizacion de los inmigrantes que carecen de permiso de residencia y trabajo, la modalidad de expulsion para quienes cometan ilicitos, la programacion de los flujos migratorios, el aumento de las penas para los ingresos ilicitos y normas mas favorables para el reencuentro familiar.
Estos puntos seran agregados al texto presentado al Parlamento por el movimiento de derecha Alianza Nacional para modificar la actual ley de inmigracion, aprobada en 1990.
Segun Caritas, los inmigrantes legalmente registrados al 31 de diciembre de 1994 eran 922.706, de los cuales 141.577 provenientes de la Union Europea (UE) y 781.129 llamados "extracomunitarios", denominacion usada para referirse a quienes provienen de paises que no pertenecen a la UE.
El 37 por ciento de esa emigracion registrada legalmente proviene de Europa, 25 por ciento de Asia, 19 por ciento de Africa, 18 por ciento de America y uno por ciento de Oceania.
El 60 por ciento se desempena en el servicio domestico, 17,5 por ciento tiene un empleo publico, 15,5 trabaja en la agricultura, dos por ciento realiza trabajos precarios y uno por ciento trabaja en la construccion.
Las preocupaciones y las propuestas del proyecto de ley en discusion se refieren sin embargo fundamentalmente a los cientos de miles de inmigrantes que ingresaron al pais en condiciones irregulares.
El proyecto presentado por Alianza Nacional establece que deben ser expulsados no solo los que cometan ilicitos, sino todos los que carecen de permiso de residencia, aunque realicen un trabajo legal.
Las expulsiones seran decididads de acuerdo a dos principcios: las "violaciones de ley" y la "peligrosidad social".
Los extranjeros que cometan delitos seran sometidos a juicio y expulsados en un plazo maximo de 72 horas despues de la condena de primer grado, en lugar de los 15 dias que establece la ley actual.
Se mantendra la posibilidad de la apelacion, pero solo volviendo a Italia del pais de origen, procedimiento que la volvera extremadamente dificil.
Tambien seran expulsados aquellos que carezcan de un regular permiso de residencia, aunque en estos casos se mantendra el tiempo de 15 dias para que la persona pueda apelar.
Quienes organicen ingresos clandestinos y exploten a los inmigrantes seran castigados con una ley especial aprobada por el parlamento italiano para combatir a las organizaciones mafiosas, que establece duras penas.
Con carcel de seis meses a tres anos seran castigados aquellos inmigrantes que destruyen el pasaporte para evitar su identificacion y de esta manera la expulsion, y tambien seran castigados con reclusion de hasta dos anos aquellos que no abandonen el pais a pesar de haber sido expulsados.
El punto mas discutido, sobre el cual esta abierta la disusion, es el que se refiere a la "peligrosidad social".
Esta clausula permitira expulsar en un plazo de cinco dias a aquellos inmigrantes que tengan "un alto tenor de vida injustificado", con el objetivo de luchar contra la explotacion de la prostitucion y el trafico de droga.
Representantes de organizaciones humanitarias criticaron este punto "porque nadie puede ser castigado en base solo a la sospecha", como afirmo Mario Marazzitti, de la comunidad catolica de San Egidio.
Junto a estas medidas de represion contra la emigracion clandestina, habra una gran apertura para posibilitar que quien no tiene permiso de residencia pero posee un trabajo pueda salir de la situacion de clandestinidad, situacion en la que se calcula que estan unas 300.000 personas.
Los empresarios pueden pedir por escrito la asuncion regular de un extranjero que trabaja ilegalmente por un tiempo determinado, o indeterminado pero no inferior a seis meses. En el primer caso deben depositar tres meses de contribuciones sociales y en el segundo seis.
Tambien se facilitara el reencuentro familiar, haciendo posible que los inmigrantes que residen en italia se reunan con sus esposas e hijos. Quien pida el ingreso a Italia de su esposa y dos hijos debe demostrar que gana al menos 1.500.000 liras, unos 900 dolares, cantidad que aumenta si los hijos son mas. (FIN/IPS/jp/jc/pr/95