La confusion, que parece ser el signo predominante de la actual crisis politica colombiana, llega incluso a los medios de comunicacion, que se enfrentan a una etapa inedita de sus relaciones con el poder.
El proceso 8.000, la investigacion que realiza la Fiscalia por presunta filtracion de dinero del narcotrafico en la politica y en particular en la campana del presidente Ernesto Samper, tambien produjo un remezon en la prensa.
"El papel de los medios ha sido disperso, fragmentado y parece que cada uno de ellos actua por motivos distintos", comento a IPS German Yances, critico de medios y miembro de la Comision Nacional de Television (CNTV), un organismo autonomo rector de la television.
"Tras 15 o mas anos de periodismo amedrentado, ahora se evidencia que las unidades investigativas de los medios estan en crisis y que el periodismo de entretenimiento marca la pauta, aun en temas como el del escandalo 8.000", anadio Yances.
La catarata de acontecimientos ha estado marcada por la revelacion, dia de por medio, de cassettes comprometedores, filtracion de expedientes, declaraciones emotivas de jueces, funcionarios, politicos y periodistas.
El politologo Fernando Cepeda Ulloa llama la atencion sobre las causas por las que cayo en el vacio una sugerencia hecha por el periodista Daniel Samper -hermano del presidente, marginado de su actividad desde la campana- con respecto a la necesidad de investigar quien graba las conversaciones telefonicas.
"A nadie le importa si las leyes las prohiben (las grabaciones) o no. Y que diga la ley sobre su divulgacion, es tan solo, si acaso, una cuestion academica", senala Cepeda Ulloa.
El politologo habla de la ironia que constituye divulgar en nombre de la libertad de informacion grabaciones interceptadas ilegalmente. "El monitoreo ubicuo significa que la gente no puede expresarse con libertad", observa.
A veces los grandes diarios y cadenas de radio y television tratan las denuncias -que ponen en entredicho la estabilidad del gobierno- con la emotividad con la que las revistas del corazon abordan las infidelidades y desnudeces de los galanes y divas de la farandula.
Segun el bando en que se localice la opinion, son reiteradas las alusiones a la "justicia show", al "manejo de imagen del gobierno" y a la competencia por la primicia que ha sobredimensionado la informacion como espectaculo.
Yances considera que "tarde o temprano" este debate "debe remitir a otro mas profundo: el monopolio de los medios de comunicacion".
El critico se refiere a un interrogante que empieza a flotar en el ambiente.
En terminos del ejercicio del poder ?es tan pernicioso que una campana politica se financie por dineros de la mafia como por dineros de X o Y grupo economico que tambien detentan el control de los medios y sesgan su posicion?, se pregunta.
Lo que en defintiva se debera discutir es "si a los gobernantes los eligen los ciudadanos con sus votos o los grupos economicos, legales o ilegales. Eso determinara para donde se inclina la balanza", afirmo.
Todo el proceso ha conducido a una "polarizacion, a la que no son ajenos los periodistas. Es necesario poner el freno, porque la responsabilidad de la prensa es orientar", planteo Patricia Gomez, subdirectora del telenoticiero Buenos Dias Colombia.
"Nos metimos en la dinamica de los acontecimientos y lo que tenemos que hacer es pensar, evaluar la informacion, tratar de dar elementos de claridad", preciso.
Gomez comento que se le "prendio un bombillo de alarma" cuando en busca de elementos de analisis sobre la situacion coincidio "con otros colegas, un politico y dos sociologos" y, al final, todos concluyeron que estaban "confundidos".
Enrique Santos, copropietario y columnista del diario El Tiempo, el mas influyente del pais, ventilo el papel de los medios en el actual momento desde su columna "Contraescape".
Ante la ausencia de "partidos politicos de verdad, una oposicion estructurada y una sociedad civil conformada, los medios han llenado en buena parte este vacio", afirma.
Santos reconoce que la prensa ha cometido "equivocaciones y desbordamientos" pero rescata que por encima de todo "sobresale una certeza: sin los medios, este pais no se hubiera enterado de lo ocurrido en la campana presidencial".
Tampoco, anade el columnista, "los colombianos tendrian la conciencia critica que hoy tienen respecto de la relacion entre narcotrafico, politica y corrupcion".
El caso de El Tiempo, de filiacion liberal como el presidente y que hasta la actual crisis se definia como "gobiernista", independientemente del partido que estuviera en el gobierno, refleja "un desamarre" entre los medios y el poder.
Sin embargo, mientras el pluralismo en sus columnas expresa "una modernizacion", el hecho de que uno de los duenos del cotidiano, el ex ministro Juan Manuel Santo, aspire a la candidatura presidencial, hace pensar que en la actual crisis hasta la objetividad este bajo sospecha. (FIN/IPS/mig/dm/cr/95
