Venezuela reanudó el despacho de lingotes a la planta procesadora de aluminio Alunasa, en Costa Rica, a pedido de sus trabajadores y en un receso del enfrentamiento político entre los presidentes Óscar Arias y Hugo Chávez.
Los sigilosos mediadores fueron un puñado de entre los 400 trabajadores de Alunasa (Aluminios Nacionales S.A.), que viajaron a Caracas a fines de febrero para entrevistarse con Chávez y mostrarle la importancia de la fábrica para la comunidad de Esparza, en la provincia de Puntarenas, del Pacífico costarricense.
En Esparza, todos los 27.000 tienen "un familiar o un amigo que trabaja en Alunasa", señalaron los obreros, y la actividad alrededor de la planta "da empleo desde transportistas hasta pequeños restaurantes", comentaron.
Chávez dio un giro al casi decidido cierre de la fábrica, propiedad de la estatal Corporación Venezolana de Guayana (CVG), que maneja un emporio de empresas básicas en el sureste, incluida la producción de bauxita, alúmina y aluminio.
Los trabajadores "se fueron tranquilos, pues garantizamos el suministro de materia prima", dijo Chávez en una de sus alocuciones radiales.
Aunque "también les expliqué los problemas que se plantean y los estudios que hemos hecho desde hace varios años para reubicar esa planta en Panamá", agregó.
Arias, quien venía de un choque político con Chávez, consideró "sabia" la decisión de su homólogo. "Me parece maravilloso. Estaba en juego no sólo el empleo de 400 trabajadores, sino el sustento de 2.500 personas", comentó.
"Si solucionamos los problemas técnicos, podríamos establecer allí una empresa tipo ALBA", dijo Chávez.
ALBA, la Alternativa Bolivariana de las Américas, es un esquema de cooperación, más para proyectos de desarrollo que comerciales, propuesto por Venezuela frente al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que impulsa Washington.
El viceministro de Industrias Básicas y Minería venezolano, Jesús Paredes, dijo que tras la reunión con los trabajadores "se va a reanudar el funcionamiento de Alunasa, ahora enmarcada en utilizar el aluminio como instrumento de integración de los pueblos latinoamericanos".
Para hacer la empresa "tipo ALBA" se intensificará el trabajo de Alunasa con la comunidad circundante, "reparando escuelas e impulsando la formación de los trabajadores y vecinos de la comunidad", agregó Paredes.
La decisión "es una manera de callar a algunos derechistas costarricenses, quienes han manipulado el tema", dijo Chávez.
También en Venezuela se observaron críticas al anunciado cierre, como las de la experta en asuntos internacionales María Romero, y Andrés Matas, estudioso de las industrias de Guayana.
El posible cierre sería "un acto revanchista de Chávez, que se ha tornado intolerante ante la más mínima crítica ya no sólo dentro sino fuera del país", dijo Romero a IPS. En tanto, Matas advirtió que Caracas sopesaba otras consecuencias.
"Si Venezuela es capaz de cerrar una laminadora de aluminio por diferencias políticas, ¿será capaz de cerrar el flujo de gas por nuestro monumental gasoducto cuando algún gobierno de los países del sur tenga la osadía de desairarla?", planteó Matas.
Venezuela, con las mayores reservas de gas de América Latina, proyecta con Argentina, Brasil y otros gobiernos la construcción de un gasoducto que en la próxima década lleve el fluido desde los yacimientos en el Caribe hasta los centros de consumo en toda el área del Río de la Plata.
El origen del contencioso político con Costa Rica fueron declaraciones de Arias después que en enero el parlamento confirió a Chávez, quien estrenaba su tercer mandato hasta 2013, facultades extraordinarios para legislar por decreto durante año y medio sobre decenas de materias.
Los 167 diputados de la Asamblea Nacional, que le confirieron ese mandato, siguen su liderazgo, debido a que la oposición boicoteó las elecciones parlamentarias de 2005 alegando falta de garantías. Además, se prepara una reforma de la Constitución que incluirá la posibilidad de reelegir indefinidamente al presidente.
Arias criticó esos poderes, pues, en su opinión, "hay una diferencia sencilla entre un dictador y un demócrata: si el demócrata no tiene oposición su deber es crearla, mientras que el sueño del dictador es eliminarla".
Chávez dijo que Arias "es de los que hablan para que los aplaudan en Washington y para que los inviten a un rancho en Texas", en alusión a la propiedad rural que tiene en ese meridional estado de Estados Unidos el presidente de ese país, George W. Bush.
Al presidente de Costa Rica "le gusta meterse en cosas que no debe. ¿Cómo quiere que llevemos buenas relaciones?", preguntó Chávez en un discurso con el que saludó una visita de su homólogo argentino Néstor Kirchner, el 20 de febrero.
En esa oportunidad afirmó que "no hay razones políticas, sino económicas y técnicas" para el cierre de Alunasa en Costa Rica y para su traslado a otro país.
Gerardo Porras, gerente de Alunasa desde que la CVG la adquirió en 1990 y hasta 2002, sostuvo que desmantelar la planta de Esparza y trasladarla a otro país "es una tarea compleja, que podría llevar un año, y sería costosísimo desmontar equipos como hornos y sistemas hidráulicos, de flujo de aceites y otros fundidos al suelo".
Con los lingotes venezolanos, Alunasa elabora varios tipos de foie (papel de aluminio), laminados, empaques, moldes, aislantes y utensilios diversos.
En 2006 hizo exportaciones por 47 millones de dólares. Un informe en la página web de CVG indica que la empresa "muestra resultados estables y una rentabilidad sobre 500.000 dólares" anuales.
Mientras se reanudan los trabajos, proseguirán los planes venezolanos para procesar aluminio en Panamá, más cerca del canal interoceánico, y de instalar otras fábricas, sobre todo para la manufactura de enseres, en Nicaragua. ***** +Alunasa (http://www.alunasa.com) (FIN/IPS/hm/mj/la ip if dv lb/07)