BRASIL: Ambientalistas traban código favorable a la deforestación

Una rápida movilización de 189 organizaciones no gubernamentales evitó que el Congreso de Brasil aprobara hoy un nuevo Código Forestal, que podría estimular una intensa deforestación.

En caso de aprobarse el proyecto, tramitado en pocos días en una comisión parlamentaria, representará un retroceso en la protección de los bosques en este país, reduciendo el área a ser preservada en las grandes propiedades rurales.

La comisión mixta que examinaba el asunto decidió el martes de noche postergar hasta marzo la votación de la propuesta presentada por el diputado Moacier Micheletto, ante la presión de las organizaciones y del Ministerio de Medio Ambiente.

En razón de esa resolución, el plenario del Congreso tampoco pudo considerar la iniciativa este miércoles, como estaba previsto.

"Fue un triunfo de la sociedad civil", celebró Garo Batmanian, director ejecutivo del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en Brasil.

El Código Forestal brasileño fue aprobado en 1965 y está totalmente superado, reconocen todos los interesados en el tema, desde el gobierno a los ambientalistas y terratenientes.

La norma sufrió alteraciones en 1996, luego de comprobarse que la Amazonia había perdido el año anterior unos 29.000 kilómetros cuadrados de sus bosques, generando una nueva ola de protestas mundiales que puso Brasil en el banquillo de los acusados a fines de los años 80, ante los grandes incendios forestales en la zona.

Las modificaciones hechas por el presidente Fernando Henrique Cardoso elevó de 50 a 80 por ciento la parte de los bosques a conservar en las grandes propiedades rurales de la Amazonia, y de 20 a 50 por ciento en el resto del país.

Pero la iniciativa se concretó por Medida Provisional, el decreto presidencial que tiene vigencia inmediata con fuerza de ley y solo por un mes. Sin la votación parlamentaria necesaria para convertirla en ley regular, el Cardoso la reeditó todos los meses, sumando 40 veces hasta ahora.

Mientras las discusiones se demoraban en el Consejo Nacional de Medio Ambiente, el diputado Micheletto presentó otra propuesta, reduciendo los porcentajes de las áreas a ser preservadas que fijara el presidente Cardoso.

También permite otros daños ambientales, como su sustituir bosques nativos por reforestación con especies exóticas, y reduce de 100 a 30 metros la faja de preservación boscosa alrededor de las lagunas y embalses hídricos.

La rapidez de los trámites parlamentarios de este proyecto sorprendió a las autoridades y al movimiento ambientalista. La propuesta solo fue discutida con la Confederación Nacional de Agricultura, que representa los grandes hacendados del país, lo cual explica el retroceso en la protección de los bosques.

En pocos días, 189 organizaciones no gubernamentales, encabezadas por WWF y el Instituto Sociambiental, organizaron protestas para impedir la votación, y los activistas fueron movilizados para presionar al Congreso.

La rama brasileña de la organización ambientalista Greenpeace, que ha realizado actos espectaculares en especial antinucleares, promovió el día 2 una manifestación frente al Palacio de Planalto, sede de la Presidencia brasileña.

En el intento de entregar simbólicamente una sierra motorizada al jefe de la Casa Civil de la Presidencia, Pedro Parente, el activista Eduardo Quartim fue detenido por la policía durante algunas horas.

El proyecto de revisión del Código Forestal representa una "autorización del gobierno a quienes destruyen el ambiente", afirmó Flavio Montiel, asesor político de Greenpeace.

Con la decisión de aplazar la consideración del proyecto por parte de los parlamentarios, la Cámara Técnica del Consejo Nacional de Medio Ambiente quedó encargada de examinar el asunto y proponer alternativas hasta fines de febrero. (FIN/IPS/mo/dm/en ip/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe