MÉXICO – Una de cada cuatro personas que ingresan de forma irregular a México consideran a este país como su destino final, reveló una encuesta de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
El año pasado, Acnur entrevistó a más de 14 000 personas que ingresaron de forma irregular a México, y de ellas 41 % que este país era su destino final, frente a 26 % registrado en 2023, pues la mayoría de los migrantes entraban con propósito de cruzar más fronteras y llegar a Estados Unidos y, en menor medida, a Canadá.
Entre las nacionalidades que más refieren a México como país de destino están Cuba (82 %), Haití (64 %), El Salvador (56 %), Nicaragua (46 %), Honduras (45 %) y Guatemala (40 %).
De las personas encuestadas, 25 % provenían de Honduras, 22 % de Venezuela, nueve por ciento de Cuba, seis por ciento de Haití, de Guatemala y de El Salvador, cuatro por ciento de Colombia y tres por ciento de Ecuador. Por género, 55 % eran mujeres y 45 % hombres.
El reporte “Tendencias y desafíos del desplazamiento forzado en México 2024«, realizado por Acnur en 19 ciudades, reveló que 55 % de las personas viajaban en grupo familiar y 45 % lo hacía de forma individual.
Un tercio de la población encuestada eran niñas, niños o adolescentes, lo que indica un desplazamiento más amplio de núcleos familiares completos.
En cuanto a las causas de salida de los países de origen, 53 % mencionó haber sido víctima directa de violencia, amenazas o intimidación, 43 % expresó temor ante la situación general de inseguridad, y 37 % señaló falta de empleo o bajos ingresos como motivo principal.
Los porcentajes de población que atribuyeron su salida a ser víctimas de violencia, inseguridad o amenazas en su país son 73 % para Ecuador, 70 % Honduras y Nicaragua, 68 % El Salvador y 65 % para Guatemala.
Esas cifras son consistentes con las de 2023, lo que confirma la persistencia del desplazamiento forzado en la región.
Además, 76 % de las personas encuestadas afirmó que enfrentaría un riesgo significativo si regresara a su país de origen (80 % en el caso de Haití), un dato que sugiere que una proporción considerable podría ser reconocida como refugiada bajo el sistema de asilo mexicano.
En 2023, Acnur documentó que 42 % de la población encuestada sufrió algún incidente de seguridad antes de llegar a México, porcentaje que subió a 58 % en 2024.
A nivel nacional, 40 % de las personas refugiadas y migrantes encuestadas reportó haber sufrido algún incidente, porcentaje que se eleva a 64 % en el norte del país, siendo el robo, la extorsión, las amenazas físicas y el secuestro los delitos más comunes.
Las encuestas fueron confidenciales, anónimas y se realizaron en espacios como albergues, vías del ferrocarril, centrales de autobuses y a población en situación de calle.
El reporte destaca que 83 % de la población encuestada no contaba con ningún tipo de documentación emitida por autoridades mexicanas, frente a 31 % en 2023.
La falta de documentación limita el acceso a derechos y servicios básicos, y subraya la necesidad de fortalecer los mecanismos de regularización y protección.
Según cifras del gobierno de México, durante 2024 se registraron 1 234 698 eventos de personas en situación migratoria irregular. Ese número es 59 % mayor que los 778 907 eventos registrados en 2023.
Por su parte, Estados Unidos registró 1 801 792 encuentros en su frontera sur con población (exceptuando a las personas mexicanas) que ingresó de manera irregular a su territorio en 2023, y 1 096 559 en 2024. Se descuenta que con las nuevas políticas de Washington esas cifras se reducen considerablemente en 2025.
El informe muestra la necesidad de una política de asilo sólida y de largo plazo, que garantice protección desde el momento de la llegada hasta la integración efectiva de las personas refugiadas en las comunidades mexicanas de acogida.
En 2024 el órgano encargado de procesar las solicitudes de protección internacional en México reconoció la condición de refugiado a 74 % de las solicitudes que concluyeron el trámite, y otorgó protección complementaria a seis por ciento.
De acuerdo con su estudio, Acnur considera que el tránsito irregular de población hacia México desde América Central y del Sur -en parte con el objetivo de llegar a Estados Unidos o Canadá- continúa siendo una experiencia peligrosa.
A-E/HM