LA HABANA – Cuba enfrenta serios desafíos en la conectividad a internet debido a apagones recurrentes y una infraestructura limitada. Con una de las velocidades más lentas del mundo, la única y estatal compañía telefónica de la isla debe lidiar con el aumento clientes y tráfico en la red sin recursos para ampliar las capacidades.
“No he tenido grandes problemas con la internet porque le doy un uso limitado, pero se vuelve casi imposible hacer llamadas por WhatsApp, por ejemplo . Mi mayor problema es cuando ocurre un apagón (corte eléctrico) y se cae la conexión”, dijo a IPS el ingeniero eléctrico Ricardo Rodríguez, que trabaja como electricista privado en La Habana.
Esta nación insular caribeña con 10 millones de habitantes soporta desde 2020 graves déficits energéticos, lo cual se ha agudizado en los últimos dos meses, cuando ocurrieron tres apagones generales que han dejado sin luz y ni conexión a cientos de miles de personas.
La limitada autonomía de servidores, torres de telecomunicaciones y dispositivos de distribución de Internet, debido a la falta de baterías de repuesto para los transmisores, provoca que casi siempre, tras los cortes eléctricos, empeore la conectividad a internet.
“No he tenido grandes problemas con la internet porque le doy un uso limitado, pero se vuelve casi imposible hacer llamadas por WhatsApp, por ejemplo. Mi mayor problema es cuando ocurre un apagón (corte eléctrico) y se cae la conexión”: Ricardo Rodríguez.
Después del primer corte general en octubre, 42 % de los sitios que soportan más de 2 500 radiobases de servicios móviles, y 32 % de los que sostienen las más de 236 000 líneas de telefonía fija, estuvieron fuera de servicio, informó Tania Velázquez, presidenta ejecutiva de la estatal y única Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa), en su cuenta de X.
Una vez por semana se publica en redes sociales la programación de apagones de los distintos territorios del país, con mayor afectación en las provincias con respecto a la capital.
Cifras lentas y poco acceso
Cuba tiene la velocidad de internet más lenta del mundo, de acuerdo al índice global Speedtest de Ookla, empresa estadounidense especializada en servicios de diagnósticos del ciberespacio.
En el periodo de junio de 2023 a junio de 2024 (la última medición registrada), la isla promedió 4,13 megabits por segundo (Mbps) en la conexión vía móvil, por debajo del país asiático Myanmar, el último de la lista con 5,09 Mbps, o Bolivia, el antepenúltimo con 10,75 Mbps.
En cuanto a velocidades de fibra óptica, Cuba también ocupaba el último lugar, el 155, con 2,93 Mbps entre noviembre de 2023 y noviembre de 2024, detrás de Siria, con 3,40 Mbps.
Ambas son velocidades que entorpecen hasta la navegación más simple y cotidiana en la web.
Autoridades del Ministerio de Comunicaciones señalaron que apenas 7 % de los hogares tienen acceso a internet, para un fondo habitacional de aproximadamente 3,9 millones. Por su parte, 84 % de los Consejos Populares (instancias administrativas locales) cuentan con al menos una solución de navegación pública.
Asimismo, 87, 5 % de la población cubana tiene capacidad de acceder, por su ubicación geográfica, a la red 3G, mientras que solo la mitad puede conectarse a la 4G.
La cobertura promedio de la red móvil 4G en la región latinoamericana y caribeña alcanzaba a 94 %, según un informe realizado con base a 14 países en 2022, a cargo del Centro de Estudios de Telecomunicaciones de América Latina y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Cuba no estuvo incluida en la investigación.
Lidia Hidalgo, vicepresidenta comercial de Etecsa, declaró en mayo, ante la prensa oficial, que tanto las redes 3G y 4G sufren una saturación de clientes.
“Si aumentáramos el acceso fijo a los hogares, mejoraría la conexión. O sea, lograr que se dependa menos de las tecnologías móviles y que se lleve la fibra óptica a casas y negocios”, dijo a IPS un ingeniero en telecomunicaciones, antiguo trabajador de Etecsa, quien pidio reserva de su identidad.
No obstante, aclaró que invertir en fibra óptica resulta más caro que aumentar las capacidades de la conexión móvil, aunque es óptimo.
Incapacidad de reinversión
Si bien Etecsa surgió en 1993, no fue hasta una década después que se convirtió en la única empresa cubana que ofrecía servicios de telecomunicaciones en el territorio nacional. Por ley, es la única que lo tiene permitido.
En 2018, con la apertura de los servicios de conexión por datos móviles a la ciudadanía, creció abismalmente la conectividad en Cuba, hasta alcanzar al cierre de abril de 2024, las últimas cifras de 7,8 millones de líneas móviles activas; de estas, 7,1 millones con servicio de internet.
La calidad de la conexión, en cambio, empeoró con la proliferación de usuarios y el aumento exponencial del tráfico en la web: de 61 834 terabytes (TB) en 2019, a 258 500 TB en 2021, y luego a 644 072 TB al cierre de 2023, según las últimas cifras de la Oficina Nacional de Estadística e Información (Onei).
Este aumento en el uso del internet, incentivado además por un proceso de transformación digital que ha promovido el gobierno, causó que Etecsa no pudiera asumir las inversiones necesarias para mantener un servicio de calidad.
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La presidenta de la Unión de Informáticos de Cuba , Ailyn Febles, afirmó a IPS que “se han podido hacer pocas inversiones desde el punto de vista de las tecnologías”, debido a las sanciones de Estados Unidos a Cuba, y una crisis económica agudizada por la pandemia de la covid.
Hidalgo, la vicepresidenta comercial de Etecsa, explicó que también ha ido disminuyendo la captación de divisas mediante paquetes de recargas a pagar desde el extranjero, una de las principales fuentes de ingresos de la telefónica.
Por otra parte, muchas de las divisas recaudadas por Etecsa han sido destinadas durante años para otros gastos o inversiones del Estado, no relacionados con las telecomunicaciones.
“Como tenemos una economía centralizada, el dinero que ingresa Etecsa se usa para lo que haga falta. Sería bueno que se destinara a las inversiones de la empresa solamente, para mejorar la calidad de conexión”, acotó Rodríguez, el ingeniero eléctrico.
Subir las precios en pesos cubanos de los paquetes de datos móviles no resolvería mucho la contabilidad de Etecsa, pues son las divisas las que sirven para invertir y las que escasean en las arcas del Estado; si acaso, disminuiría el tráfico en la web, opinó.
El paquete básico de un gigabyte cuesta unos 0,9 dólares según la tasa de cambio oficial de 120 pesos por un dólar. El salario medio en la isla equivale a 38,7 dólares.
El anónimo ingeniero en telecomunicaciones, por su parte, cree que podría mejorar la calidad del servicio de internet si hubiera otras empresas competidoras, más allá de si son privadas o estatales.
ED: EG