GINEBRA – Las agresiones verbales contra el futbolista brasileño Vinícius Júnior, jugador del club español Real Madrid, recuerdan la persistencia del racismo en el deporte, según el alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
“El abuso racial que enfrentó una vez más el futbolista del Real Madrid Vinícius Júnior en España el pasado domingo (21 de mayo) es un claro recordatorio de la prevalencia del racismo en el deporte”, dijo este miércoles 24 el alto comisionado, Volker Türk, durante una conferencia de prensa en esta ciudad suiza.
Türk llamó a los organizadores de eventos deportivos a implementar estrategias para prevenir y contrarrestar el racismo.
Recordó que hace tres años George Floyd, un hombre afrodescendiente, fue asesinado por un policía en Estados Unidos en un caso que por su difusión mediática llevó a los tribunales a los responsables, “pero esa pequeña medida de justicia sigue siendo excepcional”.
En cambio, continúan denuncias de muertes y lesiones de personas de ascendencia africana durante o después de las interacciones con las fuerzas del orden en varios países, lo que muestra la persistencia del racismo como un peligro real.
Para Türk, además de una acción firme y rápida por parte de las autoridades para garantizar la justicia en cada caso, se deben abordar las manifestaciones más amplias del racismo sistémico que impregnan todos los aspectos de la vida de los afrodescendientes, como es el caso de las justas deportivas.
“Se necesita hacer mucho más para erradicar la discriminación racial, y se debe comenzar escuchando a las personas de ascendencia africana, involucrándolas sustantivamente y tomando medidas genuinas para actuar con respecto a sus preocupaciones”, recalcó.
La oficina de Türk preparará un informe sobre el tema en las próximas semanas, con orientación y pautas en materia de derechos humanos para las federaciones deportivas y organizadores de eventos del sector.
También la directora general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), criticó en sus cuentas en redes sociales que el jugador brasileño “fue blanco de insultos racistas una vez más”.
Azoulay dijo que apoya al deportista “en la lucha contra la discriminación y la intolerancia” y que “hay que reafirmar el entendimiento y la inclusión en el seno de todos los estadios”.
Vinícius ha sido objeto de cánticos racistas desde las gradas de los estadios españoles durante las dos últimas temporadas, y cuando su equipo madrileño jugaba en la ciudad de Valencia el 21 de mayo algunos aficionados lo llamaron “mono” y corearon otras expresiones racistas.
“No fue la primera vez ni la segunda, ni la tercera”, escribió Vinícius en sus cuentas de redes sociales. “El racismo es normal en la Liga (de fútbol español). La competición lo considera normal, la federación también y los rivales lo fomentan”, aseveró.
El martes 23, cuatro jóvenes fueron detenidos como presuntos autores de haber colgado en enero una efigie de Vinícius en un puente de Madrid, deseándole la muerte. Otros tres fueron detenidos por su presunta participación en el incidente durante el partido del domingo 21.
Este miércoles, antes de un partido entre el Real Madrid y el Rayo Vallecano en el estadio capitalino Santiago Bernabéu, directivos, jugadores y aficionados dieron muestras de apoyo al futbolista brasileño, quien no participó en el cotejo debido a una lesión.
Los jugadores del Madrid salieron al campo vistiendo camisetas con el nombre y el número 20 que usa el brasileño, y contra las gradas se recostó una gran pancarta en la que se leía “Vinícius somos todos. Basta ya”.
A.E/HM