GINEBRA – Más de 40 manifestantes fueron asesinados durante las protestas en ciudades de Irán la semana pasada, informó este martes 22 la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh).
“Las fuentes dicen que más de 40 personas han sido asesinadas en ciudades principalmente kurdas (etnia minoritaria) en la última semana”, indicó una declaración divulgada en esta ciudad suiza por portavoces del responsable de derechos humanos de la ONU, Volker Türk.
Acnudh indicó que desde que comenzaron las protestas en todo el país el 16 de septiembre, más de 300 personas han muerto, incluidos más de 40 niños. Dos adolescentes de 16 años estaban entre los seis asesinados durante el fin de semana.
Los manifestantes han sido asesinados en 25 de las 31 provincias de Irán, incluidos más de 100 en Sistán y Baluchistán, provincia del sureste fronterizo con Pakistán y con mayoría de población de la etnia minoritaria baluchi.
Fuentes oficiales iraníes también han informado que varios miembros de las fuerzas de seguridad han muerto desde el comienzo de las protestas, recordó Acnudh.
Las protestas comenzaron después de que el 16 de septiembre murió la joven Mahsa Amini, bajo custodia de la policía de la moral iraní, que la detuvo tres días antes acusándola de portar indebidamente sobre su cabeza el velo islámico, hiyab.
A mediados de noviembre arreciaron las protestas para conmemorar las movilizaciones de 2019, en las que murieron centenares de manifestantes reprimidos por las fuerzas de seguridad. En una sola noche fuentes humanitarias registraron hasta 12 muertes por disparos.
Türk considera que el endurecimiento de la respuesta de las fuerzas de seguridad, subraya la crítica situación en el país, e instó a las autoridades a que aborden las demandas de igualdad, dignidad y derechos de las personas, en lugar de usar una fuerza innecesaria o desproporcionada para reprimir las protestas.
Su portavoz Jeremy Laurence dijo que “al menos seis personas relacionadas con las protestas han sido sentenciadas a muerte por cargos de ‘moharebeh’, o ‘hacer la guerra contra Dios’; o ‘efsad-e fel-arz’, o ‘corrupción en la tierra’”.
“Un número creciente de personas, incluidas celebridades iraníes y deportistas, que han expresado su apoyo a las protestas, han sido citadas o detenidas”, añadió.
El lunes 21 de noviembre, al inicio de su juego contra el equipo de Inglaterra en la Copa Mundial de Fútbol de Qatar 2022, los integrantes de la selección iraní se inhibieron de cantar el himno de su país y permanecieron en silencio, en una muestra de solidaridad con los sufrimientos de su pueblo.
Esa noche, según Acnudh, las fuerzas de seguridad respondieron “enérgicamente” a las manifestaciones en varios lugares principalmente kurdos, incluidos Javanrud y Saqqez, la ciudad natal de Amini.
Acnudh también reiteró su preocupación por el hecho de que las autoridades se hayan negado a entregar los cuerpos de los muertos a sus familias, o hayan condicionado su liberación a que no hablen con medios de comunicación.
“Cuál es el motivo detrás de eso, no estoy seguro. Pero las familias tienen derecho a que se les devuelvan los cuerpos de sus seres queridos. Es cruel que no lo sean”, expresó Laurence.
El portavoz también dijo que “la falta de rendición de cuentas por las graves violaciones de los derechos humanos en Irán sigue siendo persistente y está contribuyendo al aumento de las quejas”.
Acnudh tiene informes de que miles de personas permanecen detenidas por protestar y por ello “hacemos un llamado a las autoridades para que liberen a todos los detenidos en relación con el ejercicio de sus derechos, incluido el derecho a la reunión pacífica, y retiren los cargos en su contra”.
“Nuestra Oficina también hace un llamado a las autoridades iraníes para que impongan de inmediato una moratoria sobre la pena de muerte y revoquen las sentencias de muerte emitidas por delitos que no califiquen como los delitos más graves según el derecho internacional”, concluyó la declaración.
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