Indígenas reivindican sus derechos ante el Palacio del Planalto, sede de la presidencia de Brasil, durante su acampada anual de cinco días en la capital, en abril de 2019. Desde la llegada al poder de Jair Bolsonaro, los pueblos originarios ven el peligro los derechos que la Constitución de 1988 les reconoce. Crédito: Antonio Cruz/Agência Brasil

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