El flamante presidente del Consejo Económico y Social de la ONU (Ecosoc), Oh Joon, desempeñará un rol clave en determinar cómo se implementarán los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) posteriores a 2015 que se adoptarán en la cumbre mundial de septiembre.
En su discurso de asunción, el también representante permanente de Corea del Sur expuso su agenda diciendo: “El Consejo liderará los esfuerzos por crear una asociación global inclusiva y comprometida, que dé la bienvenida al aporte significativo que todos los actores puedan brindar”.
El diplomático considera prioritario abordar la desigualdad entre y dentro de las naciones, y anunció que convocará a una reunión especial del Ecosoc sobre este asunto para comienzos del año próximo.
“En el pasado, la desigualdad fue (tema de) una discusión aparte. Sin embargo, ahora se debate mucho más en el contexto del desarrollo”, dijo en una entrevista con IPS el representante permanente adjunto de Oh, Hahn Choong-hee.
Sobre la importancia de abordar tanto el desarrollo como la desigualdad en un mundo problemático, Hahn planteó que “no podemos lograr una sociedad realmente pacífica e inclusiva sin abordar el extremismo violento”
“Al mismo tiempo, sin alcanzar el crecimiento económico siempre hay grupos aislados y marginados que son más propensos a la violencia, lo que vuelve realmente difícil contrarrestar el extremismo violento”, añadió.
[pullquote]3[/pullquote]Hahn, un diplomático de carrera que ha ocupado altos puestos en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur y que también ha cumplido funciones en África, Europa y América, enfatizó la importancia de la asociación global con vistas a cumplir los ODS.
Esto requiere tres pasos, señaló.
El primero es comunicar los ODS, para que todos entiendan qué representan. Sin embargo, también debería haber una comprensión conceptual de asuntos subyacentes como la justicia social, la desigualdad y los aspectos económicos, sociales y ambientales, dijo.
Segundo, en el proceso deberían participar todos los actores, incluidas las organizaciones de la sociedad civil, los jóvenes, los medios de comunicación y la academia, continuó.
Tercero, todos tienen algo que aportar a los ODS. “Ya sea financiamiento del sector privado o tecnología y conocimientos de la academia”, sostuvo, “todos pueden contribuir”.
Hahn señaló una serie de temas importancia para la agenda posterior a 2015.
“A lo largo de los próximos 12 meses tenemos muchos procesos diferentes para convocar a asociaciones globales, en los que en particularmente los jóvenes estarán extremadamente comprometidos”, anticipó Hahn.
Añadió que “la sociedad considera muy evidente que la juventud es un actor crucial en los resultados del desarrollo, especialmente en los próximos 15 años, pero este no solo es un asunto del que hablar, sino sobre el que hay que actuar”.
Para este diplomático, motivar a la población para el desarrollo es clave, especialmente en áreas rurales.
“Este es un motor importante. Tenemos recursos y tecnología, pero no podemos superar esta pobreza sin que la gente entienda que tenemos que trabajar juntos con diligencia. Tenemos que movilizarnos con la motivación de que esta pobreza debe y puede frenarse dentro de nuestra generación si trabajamos dura, colectiva y estratégicamente”, expresó.
Hahn también enfatizó la importancia de la democracia para el desarrollo, citando la experiencia de su propio país.
“Democracia significa desarrollar instituciones democráticas y un estado de derecho para garantizar que el dinero que los individuos ganan con su duro trabajo estará protegido”, afirmó.
[related_articles]“En la narrativa de desarrollo de (la República de) Corea, el crecimiento económico fue avanzando mientras el proceso democrático se iba rezagando. Sin embargo, cuando la población tiene buenos ingresos y un mejor salario, empieza a querer mejores sistemas de protección de estos ingresos. Democracia significa protección y transparencia”, señaló.
A propósito de qué hacer con el extremismo, dijo que la educación, los medios de comunicación, las migraciones y los jóvenes son cuatro áreas clave para abordar el problema.
Aunque en la nueva agenda se habla de que nadie quede rezagado, “en realidad necesitamos dejar atrás a los grupos que perpetúan el extremismo violento, a fin de señalar que su argumento no es aceptable para la sociedad internacional”, dijo Hahn.
“Tenemos que aislarlos”, agregó.
“Tenemos que instruir a los jóvenes estudiantes sobre la ciudadanía global. El pensamiento crítico es muy importante a la hora de manejar la cuestión del extremismo violento, para enseñarles a los jóvenes que este no funciona en una sociedad pacífica e inclusiva”
Editado por Kitty Stapp