Las pequeñas islas del Caribe son “una bomba de tiempo” por los efectos del recalentamiento planetario, alerta un especialista en energía geotérmica, quien, además, sostiene que la única forma de frenarlo es abandonando los combustibles fósiles por las energías renovables.
El presidente de la Fundación de Energía Geotérmica Oceánica (OGEF), Jim Shnell, dijo que para resolver los problemas del recalentamiento global y del cambio climático, el mundo necesita una nueva fuente de energía que reemplace al carbón, al petróleo y a otros combustibles fósiles.
La misión de la fundación es financiar las investigaciones necesarias para aprovechar los vastos recursos geotérmicos de la Tierra.[pullquote]3[/pullquote]
“Con el recalentamiento planetario viene el derretimiento de los casquetes de Groenlandia y de la Antártida, y las proyecciones indican que al ritmo actual, ambos se habrán fundido a fines de este siglo”, explicó Shnell en diálogo con IPS.
“Si eso pasa, el nivel del mar se elevará en unos 200 pies (más de 60 metros) y hay islas que desaparecerán del todo”, añadió.
“Esa es una bomba de tiempo y hay que desactivarla, y si tengo que calificar los problemas de los países caribeños, a ese le pongo la nota más alta”, acotó.
Se necesitaron solo 84,32 centímetros de agua para que Jamaica sufriera el impacto del aumento del nivel del mar, y que uno grupo de islotes, los Cayos de Pedro, desaparecieran en los últimos años.
La mayoría de los científicos ya alertaron que a medida que aumenta el volumen del mar, quedarán sumergidos países insulares enteros, desde Maldivas hasta Islas Marshall, se inundarán vastas extensiones de tierra en países como Bangladesh o Egipto e inundarán partes de muchísimas ciudades costeras.
En el Caribe, los especialistas también señalaron la posibilidad de que en 40 años Barbuda desaparezca.
Los países pueden “esencialmente eliminar” la amenaza pasándose a las energías renovables, sostuvo Shnell, con lo que disminuirían el volumen de combustibles fósiles o de carbón que queman.
“El principal responsable del cambio climático son los gases invernadero y uno de los más importantes, en términos de volumen, es el dióxido de carbono”, remarcó.
“Durante mucho tiempo, 40 por ciento de la electricidad producida por muchos países, procedía del carbón porque era muy barato, había mucho carbón para quemar”, acotó Shnell.
“Pero ahora los países se dan cuenta de que tienen que cambiar eso y, de hecho, a principios de este mes, en la reunión del (Grupo de los siete países más ricos) G-7, los gobernantes dijeron que se volcarían 100 por ciento a las fuentes renovables, es decir, dejar del todo de quemar carbón y otros combustibles fósiles para fines de siglo”, subrayó.
“El problema es que en términos del recalentamiento global, quizá ya sea demasiado tarde”, se lamentó.
Shnell fue uno de los muchos y destacados especialistas en energías renovables que se reunieron en Martinica a fines de junio para considerar alternativas para el desarrollo de energías renovables en el Caribe.
La organización de la Conferencia de Martinica sobre la Transición Energética de las Islas estuvo a cargo de la Agencia Internacional de Energía Renovable (Irena, en inglés) y el gobierno de Francia, donde se realizará la 21 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, en París, del 30 de noviembre al 11 de diciembre.
“Hay muchos fondos climáticos que se están desplegando para apoyar y promover las energías limpias”, señaló el especialista del Banco Mundial, Migara Jaywardena, en la conferencia.
“Hablamos sobre los desafíos que afrontan los pequeños países insulares, muy endeudados, para movilizar capital y hacer la conexión con las energías limpias”, dijo en entrevista con IPS.
“Quieren hacerlo, pero no hay suficientes fondos y recuerde que hay muchas otras cuestiones de desarrollo que compiten, no solo en materia energética, sino otros. Como esta conferencia nos lleva a la COP21 en París, creo que formar parte del diálogo climático es importante porque crea una oportunidad para comenzar a tener a acceso a esos fondos”, opinó Jaywardena.[related_articles]
Shnell dijo que las economías del Caribe se vieron muy perjudicadas por el costo del combustible, pero eso debe funcionar como incentivo para redoblar los esfuerzos a fin de evitar la importación de petróleo.
“El petróleo que importas y quemas se vuelve en contra y contribuye al recalentamiento global y la posible inundación de las islas, por lo tanto tiene grandes recursos potenciales en lo que respecta a la energía solar y eólica y, por cierto, geotérmica”, indicó.
“Lo que proponemos es combinar los recursos. Creemos que sería un error tratar de elegir una alternativa como única fuente de energía. Es la combinación, por las diferentes características de cada una y sus momentos diferenciados de disponibilidad, por lo que funcionan mucho mejor juntas”, arguyó Shnell.
Las fuentes eólicas y solares son intermitentes, pero las empresas proveedoras de energía deben ofrecer el servicio de forma permanente, puntualizó.
“Por eso se necesita la energía geotérmica o hidroeléctrica que funciona todo el tiempo y ofrece suficiente energía para mantener el servicio, aun cuando no hay energía solar. Debes tener un equilibrio en los recursos. Y es posible lograrlo y seguir teniendo alternativas 100 por ciento renovables y sin combustibles fósiles”, subrayó Shnell.
Un legislador de San Cristóbal y Nieves dijo que la federación adopta la energía solar con una planta en San Cristóbal, que genera alrededor de un megavatio de electricidad y otra en construcción, que producirá cinco megavatios.
Por su parte, el ministro de Energía de ese país, Ian Liburd, dijo a IPS: “En lo que respecta a la energía solar, nos acercaremos a la producción de 1,5 megavatios”.
“Como gobierno, nos lanzamos a toda velocidad para garantizar que haya energía renovable, por supuesto, con el objetivo de reducir el costo de la electricidad en San Cristóbal y Nieves”, subrayó
A fines de 2013, legisladores de Nieves eligieron a la Compañía Internacional de Energía Renovable de Nieves para desarrollar un proyecto de energía geotérmica, que terminará eliminando la necesidad de generar electricidad a partir del gasóleo al reemplazarlo por fuentes renovables.
Editado por Kitty Stapp / Traducido por Verónica Firme