Solo siete presos por motivos políticos figuran entre los beneficiados del indulto concedido por el gobierno cubano de Raúl Castro a casi 3.000 reclusos. La mayoría de ellos ya estarían en libertad.
La Gaceta Oficial de la República de Cuba publicó el miércoles 28 una edición especial, fechada el 24, con el decreto firmado por el presidente Castro y los nombres de las 2.991 personas favorecidas con excarcelaciones anticipadas. El mandatario había anunciado la decisión el viernes 23, al término de una reunión del parlamento.
El activista opositor por los derechos humanos, Elizardo Sánchez, comentó a IPS que el proceso comenzó el 24 de diciembre, horas después del anuncio de Castro. "Los primeros beneficiados comenzaron a salir de las cárceles el día 25", aseguró.
Sánchez confirmó este jueves 29 que en la víspera fueron liberados Alexis Ramírez y Modesto Martínez, quienes purgaban penas por sabotaje y secuestro de una avioneta para "escapar" de Cuba, respectivamente. "Con ellos, suman siete los presos políticos indultados", dijo.
El decreto, fechado el día 23, aclara que el presidente del Tribunal Supremo Popular y los ministros del Interior y de Justicia quedaron encargados de cumplir "lo dispuesto, en lo que a cada uno compete, en el término de 48 horas".
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Castro también anunció la disposición de conceder la excarcelación a 86 ciudadanos extranjeros procedentes de 25 países, incluidas 13 mujeres, condenados por delitos cometidos en Cuba, bajo la condición previa de que los gobiernos de sus naciones de origen acepten su repatriación.
Los nombres de los extranjeros no han sido publicados, aunque autoridades cubanas aclararon que en los indultos no está incluido el estadounidense Alan Gross, sentenciado este año a 15 años de prisión por delitos "contra la independencia o integridad territorial del Estado".
Unos 11 ciudadanos de Estados Unidos cumplen penas en Cuba por diversos delitos. Gloria Berbena, portavoz de la Sección de Intereses de Estados Unidos en Cuba (SINA) confirmó a IPS que ninguno fue liberado aún.
El sábado 24, el Departamento de Estado (cancillería) de Estados Unidos se expresó "profundamente decepcionado" por la exclusión de Gross de las excarcelaciones. Y Washington descarta avances hacia la normalización de las relaciones con La Habana mientras permanezca preso.
A su vez, La Habana reclama el regreso de cinco agentes cubanos sentenciados a severas penas de prisión, a quienes defiende como luchadores antiterroristas que viajaron a Estados Unidos desarmados y con el propósito de vigilar una red de "grupos terroristas" adversos al gobierno cubano.
"Los Cinco", como se los conoce, fueron acusados en Estados Unidos de conspiración para cometer espionaje y uno de ellos de "conspirar para cometer asesinato". Un jurado los halló culpables de todos los cargos en 2001 y los condenó a penas de entre 15 años de reclusión y doble prisión perpetua.
Al clausurar la última sesión anual de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Castro dijo que la información requerida sobre los extranjeros liberados se haría llegar "próximamente" por vía diplomática. Se teme que ese trámite haga más lento el proceso.
El diario mexicano La Jornada publicó este jueves que hay 23 personas de esa nacionalidad procesadas en Cuba, aunque la embajada de ese país en La Habana aún no tenía comunicación del gobierno de la isla sobre la excarcelación de alguna de ellas.
En cuanto a la liberación anticipada de reclusos cubanos, el mandatario explicó que el decreto favorece a mujeres, enfermos, personas con más de 60 años de edad y jóvenes que han elevado su nivel cultural y sus posibilidades de reinserción social.
Quedaron excluidos del beneficio, "salvo contadas excepciones", los sancionados por delitos de espionaje, terrorismo, asesinato, homicidio, tráfico de drogas, pederastia con violencia, violación y corrupción de menores y robo con fuerza en vivienda habitada.
"No obstante, serán puestos en libertad algunos condenados por delitos contra la seguridad del Estado que han extinguido en prisión una parte importante de la pena, con buena conducta", señaló Castro. Los indultos son "una muestra más de la generosidad y fortaleza de la Revolución", agregó.
La decisión tuvo en cuenta las características de los delitos, la buena conducta de los reclusos, muchos de los que cumplieron una parte importante de la condena, así como la edad y las enfermedades que padecen.
El masivo indulto también respondió a solicitudes de familiares y de instituciones religiosas, y constituye un gesto ante la anunciada visita del papa Benedicto XVI y la celebración del 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre.
Cuba registra en su pasado excarcelaciones aun más numerosas. Tras reuniones entre emigrados y autoridades de esta isla, entre el 20 y el 21 de noviembre de 1978, salieron de prisión unos 3.600 reclusos. Un indulto a raíz de la visita del papa Juan Pablo II en 1998 permitió liberar a 299 presos.
Gestiones humanitarias de la Iglesia Católica y un diálogo entre el cardenal Jaime Ortega y Castro, facilitaron entre 2010 y principios de este año la liberación de más de 100 prisioneros que, en su mayoría, viajaron con sus familiares a España y otros países.
Ese proceso completó la libertad de 75 opositores que habían sido apresados y sentenciados a severas condenas en 2003, acusados de conspirar con una potencia extranjera con fines subversivos. Las autoridades sostuvieron que no eran presos "políticos", sino "contrarrevolucionarios" que atentaron contra la seguridad del país.