La pequeña comerciante Charity Karemi está entre los muchos keniatas que no ven con entusiasmo los supuestos beneficios que les traerá la flamante Constitución.
"No me preocupa. Incluso si la implementan, sólo beneficiaría los intereses de las personas acomodadas. Pero las mujeres comunes seguiremos sobreviviendo con el sudor de nuestra frente", señaló.
En agosto, 67 por ciento de los keniatas aprobaron la nueva Constitución, promulgada el 27 de ese mes por el presidente Mwai Kibaki. Le ley fundamental ofrece más libertades civiles y consagra derechos sociales y económicos clave.
Además mejora el estatus de las mujeres otorgándoles derechos en los ámbitos de la vida pública y privada.
A Karemi le preocupa que el gobierno carezca de voluntad para ayudar a las mujeres que trabajan duro en pequeños comercios para alimentar y educar a sus familias.
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"¿De dónde va a sacar dinero una mujer del interior del país para comprar su terreno?", preguntó, refiriéndose a derecho de propiedad consagrado por la Constitución.
"Sí, conocemos los beneficios", señaló Margaret Njeri, coincidiendo con varias de sus compañeras que trabajan seleccionando granos en el mercado de cereales Nyamakima, en el centro de Nairobi. "Pero cuándo se hará realidad, cuándo comenzará y cuánto tiempo llevará el proceso", preguntó.
Njeri gana el equivalente a 2,50 dólares por saco de maní bien seleccionado. Llena por lo menos dos al día. Con eso ayuda a pagar el alquiler de su casa y la educación de sus hijos.
Organismos del gobierno, partidos políticos y la sociedad civil se movilizan para elaborar estrategias tendientes a implementar la ley fundamental, indicó Millie Odhiambo, legisladora del Movimiento Democrático Naranja (MDN) y abogada especializada en derechos de las mujeres y los niños y niñas.
"Sabemos que muchas mujeres no han tenido la posibilidad de comprender qué promueve la nueva Constitución, pero está previsto comenzar una campaña de información cívica", indicó.
"Los cambios comenzarán a implementarse a partir de las dudas que se reiteraron en la campaña para el referendo. Las mujeres preguntaban si era una mera una aspiración o una realidad", añadió.
El MDN aprovechó la propaganda contra la nueva Constitución para informar a la población de las novedades, en especial respecto del tiempo que llevará a hacer los cambios, explicó Odhiambo.
Los detractores de la ley fundamental se concentraron en cuestiones como el artículo sobre el aborto y varios asuntos sobre la propiedad de la tierra.
"Algunas de las cuestiones para atraer la atención de las mujeres de a pie son asuntos como el paquete especial, llamado Fondo de Igualación, previsto para personas discapacitadas, huérfanos y menores vulnerables, mujeres y niños y niñas en general", explicó Odhiambo.
El gobierno creará un programa de educación cívica integral para mujeres, niñas y niños, entre otros grupos sociales postergados, a través de los ministerios de Género y de Justicia, indicó.
Numerosos partidos políticos están abocados a preparar sus respectivas ofertas en materia de educación cívica.
La implementación de la nueva Constitución obliga a preparar unos 49 proyectos de ley. El proceso llevará varios años, demasiado para que mujeres como Karemi y Njeri puedan gozar de los derechos consagrados por la nueva ley fundamental.
