SUDESTE ASIÁTICO-JAPÓN: Ayuda con intenciones ocultas

El primer ministro de Japón, Yukio Hatoyama, trata de lograr algo más que sólo llenar el ojo con el paquete de asistencia de 5.600 millones de dólares que prometió a la región del Mekong, en Asia sudoriental, según analistas.

El río Mekong, que recorre unos 4.800 kilómetros, nace en las montañas del Tíbet, atraviesa la provincia china de Yunnan y recorre Birmania, Camboya, Laos y Tailandia hasta su desembocadura en Vietnam. Su cuenca constituye una de las regiones más pobres del sudeste asiático.

Las intenciones subyacentes de Japón hacia los países asiáticos, en especial los de la cuenca del Mekong, no han cambiado de forma significativa, aseguró Tomohiko Taniguchi, analista en política exterior de la prestigiosa Universidad de Keio.

Lo que cambió, según Taniguchi, es la sensación de urgencia y crisis de muchos políticos japoneses ante la posibilidad de que la región se convierta en un patio trasero de China.

El primer ministro japonés se propone crear una comunidad asiática similar a la Unión Europea (UE), indicó.
[related_articles]
En los últimos 10 años, China aumentó su asistencia a la región del Mekong e invirtió en minas y plantaciones de caucho en Laos y mantuvo un intercambio comercial con Birmania.

El gigante asiático otorga "una considerable asistencia a Camboya, Laos y Vietnam, que por general no tiene grandes condicionamientos e incluye un intercambio cultural", según un informe divulgado en 2008 por el Instituto Internacional de Desarrollo Sustentable, con sede en Canadá.

Hatoyama no se refirió a ningún tipo de rivalidad entre China y su país al anunciar el paquete dentro de su asistencial oficial al desarrollo, en la cumbre entre Japón y los países del Mekong, realizada en Tokio el 6 y 7 de este mes.

Por el contrario, señaló que ambos estados mantienen intercambios para explorar formas de colaboración de mutuo interés.

Los 5.600 millones de dólares, que Japón entregará en los próximos tres años, se suman a los alrededor de 4.500 millones de dólares que Tokio brinda a la región del Mekong desde 2007. El paquete apunta a fortalecer el papel de este país como promotor del desarrollo.

"Es una prioridad para Japón aumentar la asistencia oficial al desarrollo para que la región avance", declaró el primer ministro japonés.

La iniciativa muestra el interés de Tokio por estrechar sus relaciones con la rica región, donde viven unas 220 millones de personas, y de contrarrestar los crecientes vínculos de China con los países de la cuenca.

"Japón trata de asumir un papel más activo para contener la atractiva ofensiva de China y su creciente influencia", indicó Jeffrey Kingston, especialista de la Universidad de Temple, en Tokio.

La asistencia al desarrollo es importante en la cuenca del Mekong, porque constituye una suerte de patio trasero de potencias regionales como Singapur, Indonesia, Malasia y Tailandia, miembros originales y de peso de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), según Taniguchi, de la Universidad de Keio.

El bloque fundado en 1967 está integrado por Birmania, Brunei, Camboya, Filipinas, Indonesia, Laos, Malasia, Singapur, Tailandia y Vietnam.

Además, el río es una importante vía de comunicación y tiene gran importancia para la economía japonesa.

La estabilidad económica de los países asiáticos es uno de los principales objetivos políticos de Japón y de Estados Unidos, apuntó Taniguchi.

Japón también prometió seguir aumentando la asistencia al desarrollo para proyectos de transporte, agua, eliminación de residuos, tecnología y cambio climático en la región.

"El principal objetivo de la cumbre es discutir cuál es la mejor forma de colaboración entre Japón y los países del Mekong a fin de reducir o eliminar el desequilibrio entre los países de la Asean", señaló Kazuo Kodama, portavoz de la cancillería japonesa.

Hay miembros muy pobres dentro de la Asean, como Laos, y otros muy industrializados, como Singapur.

Además de Japón y China, el gobierno estadounidense de Barack Obama demostró un gran interés por la región, a diferencia de su predecesor George W. Bush (2001-2009).

"El hecho de que Estados Unidos y China aumenten su cooperación con la región del Mekong no es malo para Japón", declaró Hatoyama. "Al contrario, es bueno crear una relación que beneficie a todos", añadió.

El esfuerzo de Estados Unidos de promover la democracia en la región será bienvenido, apuntó, en alusión a Birmania, gobernada por sucesivos regímenes militares desde 1962 y representada en la cumbre por el primer ministro Thein Sein.

Fue la primera vez que un primer ministro birmano visitó Japón desde 2003.

A las organizaciones no gubernamentales que promueven duras sanciones contra ese país les preocupa que la propuesta de Hatoyama, de crear una comunidad de Asia oriental, disminuya el asilamiento de Birmania y habilite al Banco de Desarrollo Asiático a financiar proyectos allí en el marco de la asistencia a la región del Mekong, según Kingston, de la Universidad de Temple.

La comunidad de Asia oriental es una iniciativa que tiene el primer ministro japonés desde que asumió el cargo en septiembre. El bloque, que estaría integrado por Australia, China, Corea de Sur, India, Japón, Nueva Zelanda y los 10 miembros de la Asean, se propone mejorar los vínculos regionales al igual que ocurrió con la UE.

El primer ministro de Vietnam, Nguyen Tan Dung, aplaudió la iniciativa de Hatoyama porque "contribuye a crear una comunidad abierta y transparente en Asia oriental a largo plazo".

Los gobernantes reunidos en Japón se comprometieron a trabajar por "una década verde para la región del Mekong", a partir de 2010.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe