Cuando sólo transcurre la mitad de su mandato, el presidente de México, Felipe Calderón, busca reinventar su gobierno ante la grave crisis económica y de seguridad que afronta el país. Pero los cambios de ministros y las medidas de ajuste anunciadas este martes parecen insuficientes a juicio de analistas.
Un día después de anunciar los ajustes dentro de su equipo ministerial, Calderón dio a conocer una amplia agenda de cambios en la estructura financiera del Estado, dentro del paquete presupuestal para 2010 y en lo que pretende ser la mayor reforma emprendida desde que asumió el gobierno el 1 de diciembre de 2006.
En un mensaje en la residencia presidencial de Los Pinos, el gobernante informó este martes la eliminación de las secretarias de Turismo, de Reforma Agraria y de la Función Pública.
Además, indicó que promoverá reformas al sector financiero para una mayor regulación y que enviará al parlamento proyectos de reforma laboral para posibilitar más contrataciones en el ramo empresarial y un nuevo intento por cambiar el marco jurídico del rubro energético.
Las medidas esbozadas por el Poder Ejecutivo incluyen también una reducción de la plantilla de funcionarios de alto nivel, junto con la disminución de 10 por ciento y luego congelamiento de los salarios de los mandos superiores y medios de la administración pública. Asimismo, se planea una contracción en el gasto de las legaciones diplomáticas mexicanas y la eliminación de programas sociales ineficaces.
Las nuevas acciones redundarían en el ahorro de unos 13.000 millones de dólares, afirmó. Este año ya se registró un recorte de aproximadamente 4.000 millones de dólares.
"Hoy por hoy, lo que todos los países globalmente están haciendo es endeudarse para buscar en el futuro lograr un mayor crecimiento y empleo. En México, sin embargo, pareciera que las políticas públicas y fiscales son procíclicas, es decir, cae la economía y el empleo y la propuesta es una incluso mayor reducción fiscal para 2010", analizó para IPS Enrique Dussel, coordinador del Centro de Estudios México-China de la estatal Universidad Nacional Autónoma de México.
Calderón anunció el lunes la salida del secretario (ministro) de Agricultura, Alberto Cárdenas, del fiscal general Eduardo Medina y del director de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), Jesús Reyes.
En los dos primeros casos, correligionarios de Calderón, los cambios se relacionarían con la situación de violencia enlazada al crimen organizado y la recesión económica que, respectivamente, sacuden a este país norteamericano.
Desde su llegada al gobierno en diciembre de 2006, Calderón ordenó la integración del ejército al combate del narcotráfico mediante el despliegue de miles de soldados en las zonas más afectadas por ese flagelo. Pero desde esa fecha a agosto pasado, la cifra de muertos vinculados a esa actividad criminal superó los 14.000, según recuentos extraoficiales.
Además, organizaciones de derechos humanos mexicanas e internacionales han acusado a las fuerzas armadas de graves atropellos durante los operativos antidrogas.
En la cartera de Agricultura, Calderón nombró a Francisco Mayorga, quien ya ocupó ese cargo a fines de la administración de Vicente Fox (2000-2006), para suceder a Medina designó a Arturo Chávez, quien entre 1996 y 1998 fue procurador de Justicia en el norteño estado de Chihuahua. El Senado tiene que ratificar ese nombramiento.
El sustituto de Reyes es Juan Suárez, un doctor en Economía egresado de la estadounidense Universidad de Chicago y quien fungió en 2005 como director de Finanzas de Pemex.
"Son nombramientos sin consensos, que se realizan de forma unilateral. El presidente los lleva a cabo sin haberse acercado al Partido Revolucionario Institucional (PRI), que tiene la mayoría en el Congreso", dijo a IPS Arturo Argente, director del Departamento de Derecho del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey en Toluca, ciudad ubicada a 66 kilómetros de la capital mexicana.
"Además, se dan en tres áreas muy delicadas, el campo, el narcotráfico y el petróleo", apuntó.
Las rotaciones ocurren dos meses después de los comicios intermedios de julio, antes de las presidenciales de 2012, y en los cuales el gobernante Partido Acción Nacional (PAN) sufrió un fuerte retroceso en su representación en el parlamento y el opositor PRI aumentó sus puestos.
Desde semanas atrás, las columnas políticas y económicas señalaban la inminente destitución de Medina en la Procuraduría (fiscalía) General de la República (PGR) y Reyes, de filiación priísta, en Pemex.
La oposición política reclamaba desde el año pasado ajustes en el gabinete ministerial, a raíz de los indicios de que las crisis económica y de seguridad se acentuaban.
Con los nombramientos en Agricultura y la PGR, Calderón garantiza el control de su partido sobre ambas carteras. Mayorga proviene del bastión panista del sudccidental estado de Jalisco, el mismo sitio de origen que su predecesor.
Mientras, Medina es un funcionario reciclado del gobierno Fox, también del PAN, y en cuyo régimen fue secretario de Seguridad Pública. Cuando Calderón asumió, lo trasladó a la PGR.
Chávez arrastra tras de sí la falta de resolución en los casos de asesinado de mujeres en la norteña Ciudad Juárez. De hecho, la oficial pero autónoma Comisión Nacional de Derechos Humanos lo acusó de obstruir la investigación.
Entre 1993 y 2003, más de 300 mujeres fueron asesinadas, casos en su mayoría todavía impunes, según la organización humanitaria Amnistía Internacional. Además, el estado de Chihuahua, donde está Juárez, es el que presenta mayores índices de violencia relacionados con el crimen organizado.
"Chávez no podrá solucionar los asuntos de justicia de una nación que se desmorona. Francamente, nos parece la mayor incongruencia del gobierno de Calderón, no entendemos cómo hará con un personaje cuyo historial deja mucho que desear y que tiene señalamientos de negligencia, entre otros", declaró a IPS Marisela Ortiz, cofundadora de la no gubernamental Nuestras Hijas de Regreso a Casa.
Esa organización surgió para demandar el esclarecimiento de lo que se ha conocido como "las muertas de Juárez" y el castigo a los responsables de esos homicidios.
México sufre la peor crisis económica de su historia moderna, incluso más que la registrada en 1995. Este año la economía se contraerá ocho por ciento, en lo que será el peor desempeño de América, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Además, el desempleo alcanzó cuatro por ciento en el transcurso de 2009, la inflación acumulada en los últimos tres años se ubicó en 15 por ciento y la depreciación del peso frente al dólar en ese mismo periodo es de 24 por ciento.
En el caso de la agricultura, la sequía ha puesto en riesgo cosechas y la crianza de animales en prácticamente todo el territorio nacional.
Suárez, quien trabajó también en la banca privada y la industria cervecera mexicanas, también arrastra expedientes grises, pues se le vincula en los últimos cuatro años con actividades irregulares durante su anterior paso por Pemex.
Una investigación de la Secretaría (ministerio) de la Función Pública sobre supuestos tratos corruptos entre funcionarios de Pemex y la empresa Arrendadora Ocean Mexicana, que alquilaba un buque petrolero de la firma noruega Bergesen a 15 años por 758 millones de dólares, alude a Suárez.
Además, se le señala de haber otorgado, sin licitación pública de por medio, 30 contratos de Pemex por 50 millones de dólares.
"No encuentro a primera vista un denominador común, un rasgo que permita hablar de un reajuste ministerial con miras a un propósito", señaló Miguel Granados, en una columna publicada este martes en el periódico Reforma, en relación con los cambios en el gabinete.
Nuestras Hijas de Regreso a Casa anunció que lanzará una denuncia internacional por la selección de Chávez.
"El Senado debe revisar muy bien los antecedentes de este sujeto. Le pedimos aplique una buena dosis de cordura y, sobre todo, de ética. No puede ratificar a alguien que probadamente incumplió con su deber y, aún más, se le adjudica una larga cadena de atropellos a los derechos humanos", señaló Ortiz.
"Vemos que el presidente tiene una tendencia de hacer un frente un poco más alejado de los derechos humanos en el combate al narcotráfico y la inseguridad. Es posible que el Senado no ratifique a Chávez, va a hacer sentir su poder. Calderón puede sufrir un fuerte revés", previó Argente.