Agentes de seguridad y aduaneros de Estados Unidos hostigan y maltratan rutinariamente a miembros de la comunidad islámica en aeropuertos y puestos de frontera, advirtió la Asociación Nacional de Abogados Musulmanes (NAML).
Los viajeros musulmanes o que aparenten serlo son sometidos a "preguntas personales intrusivas y profundas sobre sus creencias políticas y religiosas, sus finanzas, sus donaciones a organizaciones caritativas y su vinculación con organizaciones y asociaciones legales", según NAML.
Esto sucede aunque los agentes carezcan "de cualquier evidencia de mala acción" que involucre a los indagados, sostuvo la organización.
Muslim Advocates, una grupo patrocinado por NAML, indicó este martes en un informe que estadounidenses musulmanes o de origen árabe o sudasiático suelen sufrir, al regresar a su país, "violaciones a la intimidad generalizadas, sistemáticas y profundas a manos de agentes federales en las fronteras y aeropuertos del país".
El estudio de Muslim Advocates, titulado "Intrusiones irracionales: Investigando las ideas políticas, la fe y las finanzas de los estadounidenses que regresan", asegura que agentes del Departamento (ministerio) de Seguridad Interna y de Aduanas y Protección Fronteriza han interrogado a los viajeros sobre estas cuestiones.
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Esos agentes también sacaron copias de tarjetas de negocios y de crédito, así como el contenido de discos duros, cámaras digitales y teléfonos celulares.
"Estos interrogatorios y registros se realizan sin evidencias ni sospechas de que los viajeros estén involucrados en falta alguna", sostiene el informe.
Esta práctica policial y de inteligencia es denominada "racial profiling" o "perfil racial" (elaboración de "perfiles criminales" o vigilancia selectiva sobre la base del origen racial y religioso).
"Lejos de servir a objetivos legítimos, estos métodos socavan la seguridad, malgastan recursos gubernamentales escasos y dan origen a montañas de falsas acusaciones, al tiempo que erosionan la confianza del público en las autoridades", indica el estudio.
"¿Cuándo terminarán con el 'perfil' racial y étnico? Desde el 11 de septiembre (de 2001), el acoso a musulmanes y musulmana-estadounidenses ha sido abierto y notorio", dijo a IPS Michael Ratner, presidente del no gubernamental Centro para los Derechos Constitucionales.
"El criterio racial y étnico está permitido como base para pesquisas por el FBI (Buró Federal de Investigaciones) desde los días del (ex presidente George W.) Bush (2001-2009). (El presidente Barack) Obama debe eliminar esas instrucciones de inmediato", agregó Ratner.
El estudio de Muslim Advocates contiene docenas de casos de personas que regresaban del extranjero y que fueron hostigadas por agentes federales, en cruces de frontera terrestres y en aeropuertos internacionales como los de San Francisco, Nueva York, Detroit y Houston.
Todas las víctimas de maltrato fueron ciudadanos estadoundienes, "jóvenes, viejos, hombres, mujeres, un bombero, veteranos de guerra, estudiantes, abogados, médicos, altos ejecutivos de grandes compañías de tecnología de avanzada e investigadores académicos de grandes universidades", añade el estudio.
Esta actitud "no sólo viola derechos constitucionales fundamentales sino que socava la seguridad nacional", indica.
Muslims Advocate reclamó a Obama que pida una revisión de las políticas e instrucciones al personal aduanero sobre musulmanes, árabes y sudasiáticos, para adecuarlo a la primera enmienda de la Constitución, que protege la libertad de credo.
Esta revisión debería elevarse al Congreso legislativo y ser sometida al análisis de la inspector general del Departamento de Seguridad Interna, cartera para la cual, además, debería crearse el cargo de secretario adjunto (viceministro) para Libertades y Derechos Civiles.
El Departamento debería prohibir a sus funcionarios aduaneros y de fronteras usar las rutas de viaje como pretexto para interrogar a las personas según su raza, religión, origen nacional, etnicidad, crencias políticas, prácticas religiosas y aportes a organizaciones caritativas.
Mientras, el Congreso debería aprobar leyes que limiten las arbitrariedades de los funcionarios aduaneros y que prohíban el uso de la raza y la religión para elaborar un "perfil".
También el fiscal general de Estados Unidos deberá incluir la religión entre las características sobre las que deben prohibirse la elaboración de "perfiles" en el Departamento de Justicia.
El FBI admitió recientemente que apostó un informante dentro de una mezquita para recoger información sobre posibles actividades terroristas.
"Las relaciones constructivas con cualquier agencia de vigilancia de la ley deberían basarse sobre el respeto y la confianza recíprocas", dijo la presidenta del Consejo Coordinador de Organizaciones Musulmanas, Asma Hanif.
